El director de cine Carlos Saura interviene tras recibir el galardón biznaga de honor del 25 Festival de Málaga | Alberto Ortega / Europa Press
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Antonio Saura, productor de cine y segundo de los siete hijos de Carlos Saura, quien este sábado recibirá el Goya de Honor 2023 de forma póstuma, ha asegurado que su padre era "un cineasta descomunal que lo exploró todo y hasta el último momento".

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Antonio Saura recogerá en el Auditorio Andalucía de Sevilla el Goya de Honor en nombre su padre, fallecido este viernes, junto a su hermana pequeña Anna, por expreso deseo del director.

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"Él nos pidió que estuviera Eulalia (Ramón, su pareja), que no sé si va a estar finalmente, espero que sí, junto a mi hermana Anna la pequeña y yo que soy el segundo mayor, porque mi hermano Carlos es muy tímido", ha dicho.

Hace unos días, el cineasta aragonés recibió el Goya de Honor en su casa madrileña. Según ha explicado Antonio, su padre estaba "muy mal" desde finales de diciembre. "La semana pasada nos dijeron que quizá no pasara del fin de semana".

"Mi padre era un auténtico titán y su cerebro le funcionaba muy bien hasta el último momento"

"Aun así le veíamos resistir porque mi padre era un auténtico titán y su cerebro le funcionaba muy bien hasta el último momento", ha dicho.

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La salud de Carlos Saura se deterioró a raíz de una caída que sufrió en septiembre pasado y que le impidió acudir al Festival de San Sebastián a presentar su última película, el documental 'Las paredes hablan', sumado, según su hijo, a una enfermedad degenerativa.

"Ha terminado ahora, casi mejor un día antes de los Goya; al menos ha tenido la prudencia de no amargar la gala", ha apuntado.