Los estadounidenses Imagine Dragons y los madrileños Izal han protagonizado hoy la gran batalla del DCode, el último festival del verano que comenzaba esta mañana empañado por la lluvia, pero que ha revivido en una tranquila noche en la que los foráneos han conseguido ganar en decibelios al grupo patrio.
Con 25.000 entradas vendidas, el DCode prometía 17 horas de música con una veintena de grupos, aunque todas las miradas del cartel iban dirigidas a los dos pesos pesados de esta octava edición, que han llenado absolutamente tanto sus escenarios como los contiguos.
Izal, veteranos en este evento y en el segundo escenario a las 22:15 horas, se han batido frente a Imagine Dragons, en las tablas principales a las 23:35.
Tan solo ha habido diez minutos de diferencia en el terreno de juego del Cantarranas, por lo que entre concierto y concierto ha sido imposible desplazarse al otro escenario. Pero ha dado igual gracias a las pantallas en esta guerra que, por decibelios, ha ganado Imagine Dragons.
Dan Reynolds, único superviviente de la etapa inicial de Imagine Dragons, fundada en 2009, ha liderado la noche, que ha supuesto la segunda cita de los estadounidenses en Madrid este año, después de triunfar el pasado mes de abril en el WiZink Center.
Acompañados por una templada noche, que a la apertura a las 11:30 parecía una utopía, los de Las Vegas han presentado su nuevo trabajo, "Evolve".
Han empezado todos a una a la percusión antes de soltar la artillería pesada desde el principio: "Radioctive" del álbum "Night Visions", aquel de 2012 que suponía el potente comienzo de esta banda, ha sido también el primer tema en escucharse esta noche.
Con juegos de luces de colores cálidos, Reynolds ha salido al escenario sin camiseta y ha celebrado que un sitio "de paz y amor" como el DCode sea el escenario de una de las últimas citas de su gira.
"Hola mi familia. Buenas noches", decía Reynolds en castellano a un público al que la banda "ama", ha añadido. Y viceversa, obviamente, como ha demostrado la entusiasta acogida de "It's Time", donde el vocalista de Imagine Dragons ha estado arropado por una bandera de España y otra arcoíris del colectivo LGTBQI.
"Whatever It Takes", "Yesterday" y la nueva "Natural" se han intercalado con las anécdotas de Reynolds, que ha explicado que fue a clases de español en el instituto, aunque su madre se enfadaba por sus malas notas.
"Perdón por mi español", ha dicho el vocalista ante la risa de su fiel público, que se ha dejado llevar con otros cortes como "Walking the Wire", con el que han sorprendido con enormes confetis blancos contra el oscuro cielo de Madrid.
Se han puesto íntimos con un piano en "Shots", y han robado durante unos minutos a The Police "Every breath you make" para deleite del público, que ha seguido el éxtasis con "I'll Make It Up to You" y "Start Over".
Reynolds dedicaba "Rise Up" al rapero Mac Miller, fallecido hoy a los 26 años en su casa de Los Ángeles, y usaba "Demons" para hablar de la depresión y las terapias. "Vuestras vidas siempre merecen ser vividas. Siempre. Os necesitamos", decía el cantante.
Imagine Dragons ha despedido la noche en lo más alto con "Thunder", "On Top of World" y "Believer", para constatar su victoria en gritos y aplausos frente a Izal y su espectáculo más parco.
Los de Madrid han presentado en el DCode el disco "Autoterapia", el quinto álbum de estudio en los ocho años de esta banda capitaneada por Mikel Izal, junto a Alejandro Jordá, Emanuel Pérez "Gato", Alberto Pérez e Iván Mella.
Difícil decir si han generado unos u otros mayor afluencia, ya que la mayor parte del público que escuchaba a los de Madrid desde donde se subirían después Imagine Dragons, berreaban igualmente los temas de Izal, como "Ruido blanco", "Copacabana" o "Pausa".
Y es que los madrileños son unos veteranos en DCode, tras actuar en 2015 y 2013, escalando edición tras edición puestos en el cartel, y acumulando cada vez más parroquia, como ellos mismos han recordado.
"¿Quién estaba en 2013 a las de la tarde aquí?", ha preguntado el cantante, rememorando aquella primera vez con pocos espectadores. Hoy, frente a un abarrotado Cantarranas, Izal no ha podido menos que agradecer la comparación. "Ahora miraos. Daos un puto aplauso, por favor".
El público ha obedecido y no ha parado de aplaudir durante su hora y media de espectáculo, en el que han presentado cortes como "Pánico práctico" y "Que bien", donde han hecho un alegato contra el acoso."Que nadie tenga miedo de follarse a quien sea. Adiós al miedo", decía el cantante, a quien el pasado mes de mayo varias mujeres acusaron de acoso en redes sociales, para despedir este festival que, este año, cuenta con un punto de tolerancia cero contra la violencia machista.