La novela negra en España está "mejor que nunca", asegura el escritor Lorenzo Silva, director del festival literario Getafe Negro, un género que, dice, está corrigiendo la tendencia histórica de "ensimismamiento" de la literatura nacional, ya que "entra en los temas y se moja".
Ocho años después de su primera edición, este festival ha conseguido abrirse a otros temas de la cultura y la actualidad y no limitarse a reunir "a la cofradía de incondicionales de la novela negra", ha señalado Silva a Efe.
En la novela negra en España no se había vivido hasta ahora "ni tantas ni tan buenas oportunidades editoriales", además de contar con una diversidad en la que todas las opciones están "bastante bien abastecidas".
Aunque Silva considera que la novela negra de "entretenimiento" es "dignísima", sostiene que no funciona como reflejo de la realidad actual. Pero en este certamen sí se debatirán temas de actualidad, como la Transición en España, el incierto futuro de Europa o el papel de la mujer en el género negro.
Sobre este último punto, Lorenzo Silva sostiene que la novela negra es un "buen termómetro" para analizar el cambio del papel de la mujer en la sociedad y en la literatura policíaca: "Hace 50 años, si aparecía una mujer, era o una rubia fatal o estaba a la sombra de alguien. Ahora las mujeres protagonizan papeles de investigadoras y de autoridad".
Es el reflejo de una realidad social que describen tanto escritores como escritoras del género, explica el director del festival, cuyas novelas policíacas están protagonizadas por la pareja de guardias civiles Rubén Bevilacqua y Virginia Chamorro.
"Cuando empecé a escribir esta serie, las mujeres en la Guardia Civil eran seres exóticos", mientras que hoy en día "te encuentras con una teniente coronel o veinte capitanas", recuerda Lorenzo Silva.
Aunque no haya una igualdad real, se ha producido un cambio radical en tres décadas, sostiene el director de Getafe Negro, festival en el que también se abordarán las "sombras" de la Transición, una época del mismo modo presente en la literatura.
La idea del certamen era poner sobre la mesa "diversidad de voces y de visiones" y por ello, mientras escritores como Almudena Grandes y Benjamín Prado reflexionarán sobre los rastros de la dictadura en la sociedad democrática, el presidente del PP de Gipuzkoa, Borja Sémper, el juez Elpidio José Silva y la periodista Teresa Viejo hablarán de "La caída del régimen del 78".
Además, el historiador Ian Gibson, los escritores David Becerra Mayor y Pedro Herrasti y el diplomático y director de Casa de América, Santiago Miralles, debatirán sobre la memoria histórica. La octava edición de Getafe Negro, que se celebrará hasta el próximo 25 de octubre, tiene a Alemania como país invitado.
Así, contará con la presencia de Andrea Maria Schenkel, una de las autoras revelación de la novela negra europea con libros como "Tannöd", o Sebastian Fitzek, cuyo "Pasajero 23" ha vendido más de medio millón de ejemplares, entre otros muchos representantes de ese país.
Forman parte del centenar de escritores, periodistas, directores de cine y especialistas en crimen y corrupción que participarán estos días en las más de 50 actividades que se celebran dentro del festival, como Don Winslow o la flamante ganadora del premio planeta Alicia Giménez-Bartlett.
Giménez-Bartlett recibirá el próximo martes, dentro de este festival, el Premio José Luis Sampedro, que se concede a "una figura que acredita en su trayectoria creadora un nivel de excelencia sobresaliente acompañada de un especial valor humanista".
"Una carambola", asegura Lorenzo Silva sobre la coincidencia del premio con el festival Getafe Negro. Junto al galardón José Luis Sampedro, será entregado también el XIX Premio Ciudad de Getafe de Novela Negra, que ha correspondido a Jordi Juan.