Mortadelo y Filemón en 3D estereoscópico

Javier Fesser ha hecho realidad su sueño de ver en acción a los héroes de su infancia, los disparatados agentes del tebeo Mortadelo y Filemón que, curiosamente, apunta el realizador en una entrevista con Efe, le parecen "más reales que las personas que salen en los anuncios de Danone".

La película, que ha sido rodada en 3D estereoscópico y se estrena el próximo viernes en España, "tiene mucha realidad", según Fesser, experto cineasta del surrealismo y "niño" de 50 años enamorado de los dibujos de Francisco Ibáñez, porque, "cuando los ves comportarse y les oyes hablar, te das cuenta de que estos tipos tienen muchas cosas a las que agarrarte y con las que identificarte".

"La gente que ves en el Metro, incluido tú mismo (...), se parece más a estos dos que las personas que salen en los anuncios de Danone; la vida por la que pululamos los de a pie -opina- tiene arañazos y golpes, porque la vivimos, y esto, que es un tebeo, y es una locura, se parece mucho a la realidad", asegura.

Con su anterior cinta, "Camino" (2009), Fesser ganó dos Goya -mejor director y guión- de los seis que se llevó la cinta, un galardón que sumó al obtenido en 1995 con su primer corto, "Aquel ritmillo", y también estuvo nominado con su debut, "El milagro de P.Tinto", aunque el reconocimiento popular vino con la taquillera "La gran aventura de Mortadelo y Filemón", con actores reales.

"Yo tengo un trabajo que es contar historias, no todas son iguales ni se cuentan con las mismas herramientas (...), pero pienso que es importante no repetirte, y en este caso -reflexiona-, al trabajar en un proceso nuevo totalmente para mí (el 3D), esa novedad vino dada".

"Ahora, quizá es verdad -concede- que siempre estamos haciendo la misma película, e incluyo 'Camino' en el saco, pero quizá me pasa como a Ibáñez, que, aunque sea lo mismo, siempre busco algo distinto".

GUARDA LA ESENCIA DE IBAÑEZ

Con guión de Fesser y Claro García, esta "Mortadelo y Filemón contra Jimmy El Cachondo" guarda la esencia de las historietas de Ibáñez con los miembros de la agencia TIA (Técnicos de Investigación Aeroterráquea) cazando al malo por casualidad después de sufrir un accidente tras otro, si bien aporta momentos muy divertidos y chocantes.

Entre ellos, el "karaoke" con los personajes interpretando a Julio Iglesias, el sueño de Filemón transmutado en un superagente 007 del futuro o Mortadelo disfrazado de Tejero para dar el golpe de Estado del 23-F.

Apunta Fesser que tiene "pocas explicaciones" para las cosas que hace y que normalmente espera "muy abierto a lo que venga en cada minuto", sin tener una idea preestablecida.

En ese sentido, explica que Jimmy El Cachondo, que iba a ser andaluz, al final lo inspiró un humorista argentino, Favio Posca.

Ese "histrionismo inclasificable", apunta Fesser, lo bordan tanto el argentino Gabriel Chame, en el papel de Jimmy, como Karra Elejalde, como Mortadelo; Janfri Topera (Filemón); Mariano Venancio (El Súper) o Emilio Gaviria, (Rompetechos).

El único personaje inexistente en el mundo de Ibáñez (que en la película habla por teléfono con el Súper) es Tronchamulas, un compendio de todos los enemigos "de quinientas toneladas de músculo y ningún cerebro", que ayuda a entender cómo son Mortadelo y Filemón.

"Hay cosas que no pasan de moda, como el chichón en el colodrillo, que da risa siempre, pero es verdad que estéticamente esta película bebe más de otra época, y no hablo de cosas antiguas, sino de cosas clásicas", señala, y cita el Seiscientos o la Vespa, que él opina que "no envejecen".

"Para mí, poner este tipo de objetos (...) es mucho más agradecido que un Ipad u otros elementos modernos, que pueden ser muy útiles, pero cinematográficamente me sugieren menos".

De hecho, ambos vehículos están en sus otras películas: "Cualquier cosa que quieras meter en 'Mortadelo y Filemón' por muy ingenioso que te creas, ya lo ha metido antes Ibáñez; aunque los personajes y su universo ya los definió él hace 40 años -comenta Fesser-, es verdad que siempre ha ido añadiendo algo, pero lo hizo de forma que lo que es actual hoy, dentro de quince años lo sigue siendo".

Con diez millones de euros de presupuesto, la cinta es una producción de Zeta Cinema, en asociación con Películas Pendelton, que realiza Estudios Ilion de Madrid, con la colaboración de TVE, TV3, Canal+ y ONO.