Jorge Semprún murió ayer, a los 87 años, en su residencia de París. Exiliado y luego ex prisionero de un campo de concentración alemán, sobrevivió al exterminio de los nazis. Su vida ha sido un recorrido por la historia europea más reciente. Militó en el Partido Comunista, del que fue expulsado a principios de los años 60 y luego fue ministro de Cultura con Felipe González, de 1988 a 1991.
Jorge Semprún será enterrado el próximo domingo en la localidad de Garentreville, cerca de París, donde tenía una casa.
Los allegados de Semprún, que velan el cuerpo, han indicado que probablemente se le rinda homenaje el sábado en París, aunque todavía no se han cerrado todos los detalles de las exequias.
Mientras tanto, algunos amigos íntimos del fallecido han pasado por la casa en la que vivió los últimos 20 años, un edificio acomodado, colindante a la Oficina de Representación de Taiwán en Francia y emplazado detrás del Museo de Orsay.
Tras pasar dos meses ingresado en el Hospital Georges Pompidou para recuperarse de una intervención quirúrgica en la espalda el pasado mes de marzo, Semprún había regresado hace un mes a su hogar, donde falleció ayer.
"Sabíamos que tenía algo muy serio en la cabeza. Cuando lo supimos comprendimos que era el principio del fin", lamentó de Clermont-Tonnerre, quien señaló que la noticia no sorprendió a los que acompañaron al escritor en sus últimos días.
No obstante, sus amigos y los empleados de su hogar le recuerdan incluso en sus últimos días como un hombre amable, inteligente, generoso y discreto y coinciden en que el escritor sabía que su vida se agotaba.