Los Príncipes de Asturias inaugurarán este viernes la 71 edición de la Feria del Libro de Madrid, un evento que volverá a desembarcar en el parque de El Retiro de la capital con 356 casetas y 272 editores, y que contará en esta ocasión con Italia como país invitado. La feria podrá visitarse hasta el próximo 10 de junio.
La crisis y la incertidumbre económica en España marcarán esta 71 edición de la Feria del Libro de Madrid, que no se quiere rendir al descenso de las ventas y de los presupuestos culturales.
LIBRI PER TUTTI
El tradicional Paseo de Coches del Parque del Retiro de Madrid volvera a acoger el evento que tendrá a Italia como protagonista. El mundo de las letras y de las ideas italianas estará representado por personalidades como el Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 2004, Claudio Magris, Erri de Luca o Roberto Calasso.
Esta invitación coincide con el hecho de que España sea también asistente de honor en la Feria del Libro de Turín.
En total, se celebrarán 250 actividades que se desarrollarán durante los 17 días que dura la feria, entre las que destacan encuentros con escritores como Eduardo Galeano, Francisco Ibáñez, Camilla Lckberg, Carlos Ruiz Zafón, Fernando Savater o Manuel Rivas, entre muchos otros. Las firmas de ejemplares se concentrarán durante los tres fines de semana.
Además, tendrán lugar mesas redondas, conferencias y debates o presentaciones de libros en las 356 casetas de esta feria, que contarán con 24 organismos oficiales, 11 distribuidores, 52 librerías generales, 66 librerías especializadas y 272 editores, de los cuales 175 son de Madrid.
El público infantil también tendrá su espacio en esta edición. Por un lado, el pabellón infantil 'Libri per tutti' hará visibles los libros populares de la tradición italiana, como 'Pinocho' o 'Sandokán' así como otras propuestas novedosas de autores más modernos, como Gianni Rodari y Bruno Munari.
La feria, patrocinada por el Ayuntamiento de Madrid, la Comunidad de Madrid y el Banco Sabadell, está organzida por la Asociación de Empresarios del Comercio del Libro de Madrid, la Asociación de Editores de Madrid y la Federación de Asociaciones Nacionales de Distribuidores de Ediciones (FANDE).
El encargado de diseñar el cartel en esta edición ha sido el artista madrileño Chema Madoz.
TIEMPOS DIFÍCILES
"Se ha producido un descenso muy significativo en cuanto al volumen de ventas, especialmente en el último trimestre", dijo el miércoles la presidenta de la feria, Pilar Gallego, en su presentación.
Gallego no quiso dar cifras exactas porque aseguró que serían "penosas", pero el presidente de la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros (CEGAL), Fernando Valverde, ha declarado que en el primer trimestre del año las ventas habían descendido de un 8 a un 12 por ciento.
"Los molinos de viento a los que se enfrenta la cultura no son fáciles de vencer", dijo, al tiempo que aprovechó para romper una lanza en favor de la Feria del Libro de Madrid, que aseguró que es el segundo evento más visitado de la capital después de sus tres principales museos, y que nunca ha presumido de cantidad sino de calidad.
Desde el Ayuntamiento de Madrid insisten en que continuarán apoyando de forma "inamovible" la feria y la protegerán de los recortes presupuestarios municipales, al igual que a bibliotecas y museos culturales.
"No son tiempos fáciles. Hay que fijar prioridades y el ayuntamiento tiene claro que la Feria está en la zona de máxima protección", dijo Timothy Chapman, coordinador de las Artes del Ayuntamiento de Madrid.
Gallego pidió un "urgente consenso social y político" sobre la trascendencia de la lectura en España.
El sector editorial en España mueve anualmente cerca de 4.000 millones de euros, un 0,7 por ciento del PIB, y da empleo, directo e indirecto, a más de 30.000 personas, según datos de CEGAL.