El Teatro Real estrena el próximo 2 de noviembre una nueva producción compuesta por dos óperas italianas del siglo XX: 'Il prigioniero', de Luigi Dallapiccola, y 'Suor Angelica', de Giacomo Puccini, dos obras que, bajo la dirección escénica de Lluis Pasqual "critican la utilización de la religión y la moral para apagar cualquier sentimiento de rebeldía del ser humano".
Así lo ha explicado Pasqual (ya dirigió en el coliseo madrileño 'Don Giovanni' en 2005 y 'Tristán e Isolda en 2008) quien ha señalado que el tema de estas dos obras no es otro que la "terrible atrocidad de alimentar la esperanza de algo que no va a ocurrir".
Y esto lo que les sucede a los protagonistas de ambas óperas (ambos prisioneros de las convenciones sociales), concebidas aquí como una única unidad dramática. Precisamente, para Gerard Mortier, director artístico del Teatro Real, esta unión en un único espectáculo de ambos títulos, permitirá al público "descubrir a Dallapiccola y, a la vez, escuchar bien a Puccini, que ha sido tan mal interpretado", ha advertido.
Así, al prisionero y a Sor Angelica se les priva de libertad por razones diferentes aunque soportan la expiación alimentando la esperanza. En la ópera de Puccini, la segunda de su famoso 'Tríptico', una madre soltera, enclaustrada en un convento, espera noticias del hijo que le fue arrebatado; en la partitura de Dallapiccola, un prisionero anhela su libertad en una tenebrosa cárcel de la Inquisición en Zaragoza.
APUNTES LÍRICOS
Para Pasqual, el dodecafonismo de Dallapiccola está, sin embargo, "lleno de apuntes líricos". La partitura de 'Suor Angelica' "está siempre a punto de caer en el melodrama, pero no cae. El tratamiento de la esperanza con esa mujer es tan de verdad que pocas veces se encuentra un Puccini más auténtico", ha asegurado.
El director de escena ha recordado la infinidad de veces que se ha hecho uso de palabras como "religión, patria o moral" y el "bien y el mal que han hecho según quien las haya dicho". Asimismo, ha destacado el "ejercicio de economía espiritual" de ambas óperas para las que se ha utilizado una misma escenografía. El torniquete que en la primera parte, con 'Il prigioniero' hace las veces de una máquina de tortura, se convierte en 'Suor Angelica' en el torno que hasta no hace mucho se utilizaba en los conventos para abandonar allí a los bebés.
"Son dos obras maestras en su género y tienen la virtud de durar escasamente una hora cada una", ha declarado Lluis Pasqual.
LÚCIDA Y TRANSPARENTE
Ha coincidido en esta apreciación el director musical de esta producción, Ingo Metzmacher (uno de los maestros "favoritos" de Gerard Mortier), que dirige las mejores orquestas del mundo, como las de Viena o Berlín y que tuvo un gran éxito este año en el Festival de Salzburgo, con 'Die Soldaten'.
Metzmacher ha destacado la "estructura musical muy clara, lúcida y transparente" de la obra de Dallapiccola y "su maestría increíble que recuerda a Bach y que es tan difícil para la orquesta". En cuanto a la obra de Puccini, por el que siente predilección, es "una joya magnífica que se acerca al alma de la protagonista".
El director musical ha añadido que la "atmósfera" opresiva y de supresión de los personajes es similar en ambas partituras y ha resaltado la importancia de esa "música silenciosa que luego acaba gritando" y que a él tanto le gusta. en su opinión, tanto Dallapiccola como Puccini son "refinados y precisos" y su música tiene una "fuerte conexión".
La soprano norteamericana Deborah Polaski será la artista que interpretará a La madre en la ópera de Dallapiccola y a La princesa en la de Puccini. Los barítonos Vito Priante y Georg Nigl se alternarán en el papel titular de 'Il prigioniero', y las sopranos Veronika Dzhioeva y Julianna Di Giacomo compartirán el rol de 'Suor Angelica'.
Acompañarán a los solistas el coro infantil Pequeños Cantores de la JORCAM, el Coro Titular del Teatro Real (Coro Intermezzo) y la Orquesta Titular del coliseo madrileño (Orquesta Sinfónica de Madrid).
El Teatro ha programado 11 funciones de este espectáculo que será retransmitido en directo por Radio Clásica el 15 de noviembre.