Una asociación madrileña premiada por fomentar la lectura en fábricas de toda España
- La Fundación Anastasio Gracia recoge este lunes en Zaragoza el Premio Nacional del Ministerio de Cultura
- Desde 2014 llevando libros y a sus autores por empresas de todo el país
La Fundación Anastasio Gracia, radicada en Madrid, recoge este lunes el Premio Nacional de Fomento a la Lectura en la ciudad de Zaragoza. Hoy es un gran día para la Fundación Anastasio Gracia. El galardón, concedido por el Ministerio de Cultura, reconoce la labor realizada por esta fundación y su proyecto 'Los libros a las fábricas'.
Desde la fundación dicen recibir un premio que pertenece "en pleno derecho" a los "7.500 trabajadores de las empresas industriales que han disfrutado con la lectura, durante los últimos nueve años, participando en el proyecto".
El agradecimiento se hace extensivo, según los premiados, "a los 75 autores que, hasta hoy, han compartido generosamente con los trabajadores un diálogo en torno a sus obras".
Lorenzo Silva, Juan Madrid, Rosa Regàs, Juan José Millás, Lorenzo Silva, Benjamín Prado, Eduardo Torres-Dulce, Amancio Prada, Javier Sierra, Espido Freire, Anna Pagés, Julio Llamazares,...y así hasta 75 nombres comprometidos con las letras y los lectores.
Hoy es un gran día para la Fundación @AnastasioGracia. Esta tarde recogeremos, en Zaragoza, el PREMIO NACIONAL DE FOMENTO DE LA LECTURA 2021 🏅por el proyecto https://t.co/54kt7OK9vp
— Fundación Anastasio de Gracia (@AnastasioGracia) February 20, 2023
Abrimos 🧵 pic.twitter.com/xsQ8DC1A64
Leer en el trabajo
El proyecto de 'Los libros a las fábricas' (loslibrosalasfabricas.es) comenzó en 2014 en empresas de todo el país. El premio, advierten desde la fundación, es también para ellas "que confiaron en nosotros para abrir espacios a la lectura durante la jornada laboral".
ABB, PSA Peugeot Citroën, Navantia, Cementos Portland, Canal de Isabel II, Renault, Nissan, Saint Gobain, Balay, Nokia, Opel...fábricas y centros de trabajo de toda España que se ha sumado a esta iniciativa cultural.
Consideración especial, dicen, para la el sindicato Unión General de Trabajadores (UGT) cuyos representantes "negociaron con la dirección de sus empresas, que los libros tengan su lugar en las fábricas".
