El cantante de la banda británica the hard rock "The Cult", Ian Astbury en el Azkena |
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Wilco y The Cult enamoraron al Azkena Rock Festival en un cierre épico que echó la persiana de la edición 18 que presentó un cartel muy variado con el que vibró el público que se acercó al recinto de Mendizabala de Vitoria.

Wilco ofreció su único concierto en España con una armonía perfecta, liderada por un introvertido Jeff Tweedy que solo se separó de su sombrero en Hummingbird.

La banda de Chicago, recomendada desde hace tiempo por Barack Obama, desplegó el sonido más guitarrero de la noche, con temas como California Stars o el deslumbrante solo de guitarra de Nels Cline en Impossible Germany, a pesar de que se palpó que los "azkeneros" esperaban uno de los temas más rompedores del grupo, Jesus, Etc.

The Cult cogió el testigo en el escenario principal y puso toda la carne en el asador con una sobria y seria actuación para celebrar el 30 aniversario de su álbum Sonic Temple, su obra magna, en la que Ian Astbury se movió con soltura y seguridad por el escenario God para interactuar con sus seguidores.

Así, los británicos sacaron a relucir todo su arsenal de hard rock con clásicos como Fire Woman o Edie (Ciao Baby) en un setlist muy potente que también se salió del legendario álbum con canciones como Spiritwalker.El viaje comenzó al mediodía en la plaza de la Virgen Blanca de la capital vasca con la puesta en escena de Danny And The Champions of The World, a los que acompañó un sol radiante para subir los decibelios e iniciar una jornada prometedora.

Ya por la tarde, en Mendizabala, el desfile empezó con los locales Outgravity, que dieron paso al getxotarra Garbayo y, posteriormente, a los americanos MT. Joy, que trasladaron su indie rock a Vitoria.

Uno de los platos fuertes, Tesla, llegó pronto (19.15 horas). Entraron con fuerza y mostraron sus habilidades guitarreras desde los primeros acordes de su heavy clásico y hard rock, tras diez años sin pisar un escenario en España.

Al mismo tiempo, también se podía optar por el country, la psicodelia y el folk de Meat Puppets, una banda que cuenta con la bendición del desaparecido Kurt Cobain y que mostraron su punk rock más solvente.La variedad volvió a ser patente un día más en este festival con el country folk de Neko Case, que llenó el escenario con su personalidad y su voz para dar paso a los esperados Wilco.

Los madrileños Morgan fueron una de las gratas sorpresas de la tarde noche. La voz de Carolina de Juan y los solos de guitarra y de piano de Paco López y de David Schulthess cautivaron y atrajeron a buena parte del público que se tomó un respiro entre los dos cabezas de cartel, con un atractivo concierto en los que relucieron Sargento de Hierro o Marry You.

Mientras tanto, al escenario Respect se subieron Gang of Four para recordar sus mejores momentos de las últimas cuatro décadas en un regreso muy esperado.

The Cult abrió las puertas a la recta final de un festival que se guardó un as bajo la manga con Philip H. Anselmo & The Illegals que preparó para Vitoria un concierto único con temas exclusivamente del desaparecido grupo Pantera.

La lucha mexicana volvió a ser otro de los focos de atracción en un Trashville que fue refugio para aquellos que decidieron cambiar el paso y evadirse del cartel más clásico.

La edición 19 de 2020 ya prepara su lista de grandes grupos entre los que estarán los californianos Social Distortion y Fu Manchu, que fueron las primeras confirmaciones de una propuesta que promete emociones fuertes como las que se vivieron en la mayoría de edad del Azkena Rock Festival.