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El lanzador de peso Manuel Martínez, que interpreta a Goliath en la película "El Capitán Trueno y el santo Grial", cree que "siempre se necesitan 'capitanes trueno' para que los poderosos no abusen de su poder".

El atleta leonés, que, junto a Sergio Peris-Mencheta (Capitán Trueno), Natasha Yarovenko (Sigrid) y Adrián Lamana (Crispin), protagoniza la película dirigida por Antonio Hernández, ha visitado hoy el salón del Cómic de Barcelona, donde se han mostrado las primeras imágenes de este film de aventuras, basado en el cómic que Víctor Mora creó en 1956 y que se estrenará en octubre.

"Supermanolo", como es conocido en el mundo del atletismo, fue campeón del mundo de lanzamiento de peso en pista cubierta de 2003 y desde que ganó la medalla de oro en el Europeo junior en 1993, ha sido 31 veces campeón de España absoluto y vencedor en numerosas competiciones internacionales. "No sé si me habrán escogido por mi físico o no, eso tendrás que preguntárselo al director", ha dicho el afable deportista, que ha reconocido que en "en esto del cine soy un novato barra intruso", pese a que ya protagonizó la película "Estigma", también basada en un cómic.

"Durante el rodaje he metido muchas veces la pata y te confieso que las primeras semanas me iba a casa con tanto dolor de cabeza, de estar atento a tantas cosas, que tenía que tomarme un paracetamol", ha confesado.

"Supermanolo" ha calificado de "fantástica" la oportunidad que le han brindado de interpretar a Goliath, aunque reconoce que en su infancia no leyó al Capitán Trueno. "No es un cómic que marcara mi niñez, aunque mis hermanos mayores si tenían algún ejemplar de 'El capitán trueno' en color", ha rememorado.

Para preparar su personaje, "Supermanolo" se ha leído casi toda la colección de 'El Capitán Trueno' pero, sobre todo, ha seguido las instrucciones del director que, apunta, "lo hacía fácil, es un gran preparador".

Tampoco le ha sido demasiado incómodo llevar un parche en el ojo, ni cargar con el "toma-toma" (mamporra de madera), ni demostrar que no necesita ningún doble para pelearse con un montón de soldados enemigos a la vez y que alguno de los especialistas saliera contusionado.

"Amigo de sus amigos, muy leal, un gran disfrutador, con gusto por la comida, la bebida, las mujeres y la buena vida, un ser muy primario, sin ideología", así ha definido a su personaje el atleta-actor. "Espero no ser yo tan primario -ha puntualizado-, aunque también me gusta la buena vida".

Tras meditar unos segundos, a la pregunta de si esta sociedad necesita un Capitán Trueno, Manuel Martínez opina que desde la época medieval las personas no han cambiado mucho y que precisamos "capitanes trueno para que los poderosos no abusen de su poder y para ayudar a los más desfavorecidos, siempre necesitamos un capitán trueno".

"'Capitanes trueno' no hay muchos, pero Goliaths hay cientos de miles", ha afirmado el atleta, que ha recordado que en su juventud tuvo un enfrentamiento físico con otro joven y su madre le reprochó: "pegar no está bien, un lanzador de peso no hace falta que demuestre que es fuerte, tiene que demostrar que es inteligente".

"Yo no le daría un mamporro a nadie", confiesa "Supermanolo", que cree que el verdadero Goliath le ganaría en una competición de peso con un lanzamiento "infinito, sacaría la bola del planeta". Manuel Martínez no se ve de actor en un futuro, una profesión que cree que "depende de la opinión de los demás". Aunque no descartaría otras ofertas cinematográficas, dice que deciarse profesionalmente al cine es "muy difícil", porque, argumenta, "tendría papeles encasillados, no creo que el eje de mi vida gire entorno al cine".