Aumentan un 24% los costes que tienen que soportar las pymes por el precio de la energía y los suministros
La organización advierte de una menor rentabilidad y un mayor endeudamiento de las empresas y un estrechamiento de márgenes
La rentabilidad de las pymes ha caído una cuarta parte desde 2019
Los costes que deben afrontar las pymes se incrementaron un 24,4% entre abril y junio de 2022 en términos interanuales, frente al crecimiento del 23,3% registrado entre enero y marzo, lo que pone de manifiesto que “se está agravando el estrechamiento de los márgenes empresariales”, según Cepyme.
Es la principal conclusión del análisis publicado este lunes por la organización sobre la situación de la pequeña y la mediana empresa en España.
El principal elemento del informe es el ‘Indicador Cepyme sobre la situación de la pyme’, que mide las fortalezas y vulnerabilidades del tejido empresarial español y se sitúa en los 5,7 puntos en el segundo trimestre de 2022, frente a los 5,4 puntos registrados en el cuarto trimestre de 2021.
Según Cepyme, este “leve” repunte se debe “al auge de actividad registrado en la primera mitad del año, pero no es suficiente para mejorar la situación general de la empresa, ya que el indicador aún se sitúa en niveles similares a los que tenía en 2014 y no ha recuperado el terreno perdido durante la pandemia”.
A la subida de los costes, se le une que las ventas crecen, pero a menor intensidad, un 14,5% en el segundo trimestre de 2022, frente al auge del 19,8% registrado en el primero.
Para Cepyme, las pymes “se están viendo afectadas por los elevados costes que tienen que afrontar en el día a día, por una importante pérdida de productividad y por la baja rentabilidad de hacer negocios”.
Los costes de la energía se han duplicado
En el incremento de los costes, destaca el coste de los insumos, que se ha disparado un 51,7% en el segundo trimestre en comparación con el mismo periodo del año anterior, lo que supone el incremento “más elevado en más de 20 años”.
Por su parte, los costes de la energía se han duplicado (+113,7%). El coste de los bienes intermedios también ha crecido un 21,5%, un porcentaje “nunca visto en más de dos décadas”, y el de los bienes de equipo, un 5,7%.
Asimismo, los costes laborales subieron un 6,2% interanual en el segundo trimestre de 2022, afectados por el incremento del 6,6% en el salario medio ordinario de las pymes. Además, el alza del salario mínimo explica “por qué los costes salariales de las empresas más pequeñas suben con más fuerza, alejándose de los incrementos salariales pactados en convenio”, que se situaron en el 2,6% en agosto.
Por este motivo, Cepyme reclamó que en las negociaciones del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) se tenga en cuenta “el fuerte aumento de los costes que están sufriendo las empresas de tamaño más reducido, dejándoles en muchos casos en una situación de pérdida de competitividad”.
Además, Cepyme apunta que la rentabilidad de las pymes ha caído una cuarta parte desde 2019. La rentabilidad neta sobre el activo (ROA) se sitúa en el 2,8%, un nivel inferior a cualquier dato registrado entre 2016 y 2020. De esta pérdida de la rentabilidad de las pymes, el 55% se explica por el menor nivel de actividad provocado por las medidas para contener la pandemia y la incompleta recuperación y el 45% restante se debe a la inflación.
Aumenta el endeudamiento
Por otro lado, la ratio de endeudamiento, medida como el pasivo total con relación al patrimonio neto, supera el 100% y encadena cuatro trimestres consecutivos de aumentos. Se sitúa en su nivel más alto desde 2018 y 12,7 puntos porcentuales más que un año antes.
El informe destaca que es preocupante que este incremento “se esté produciendo antes de que termine de completarse el proceso de desapalancamiento iniciado en 2008”. De hecho, al elevado nivel de deuda actual, con los “consiguientes costes aparejados para las empresas”, “habrá que sumar una factura adicional en las cuentas empresariales por la subida de los tipos de interés”.
Más impacto en las pequeñas
Este indicador también refleja que existe una brecha “cada vez más acentuada entre la realidad que viven en el día a día las pequeñas empresas y las medianas”, pues el valor se sitúa en los cinco puntos en el caso de las pequeñas empresas frente al 6,4 que obtienen las medianas compañías.
Así, las ventas crecen más en las empresas medianas (+17,3%) que en las pequeñas firmas (+13,4%) y mientras que el ritmo de expansión del número de empresas medianas es el mayor en 15 años (+7,1%), el número de pequeñas empresas crece un 2,5%, algo que ocurre también en el empleo. Este se incrementó en las medianas empresas un 8,1% en el segundo trimestre y en las pequeñas la subida fue del 5,9%.
Además, los costes totales aumentan más para las pequeñas compañías (+27,2%) que para las medianas (+21,2%).
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