BBVA registró un beneficio neto de 6.420 millones de euros en 2022, lo que supone un incremento del 38% respecto a un año antes (+39% sin el efecto de las divisas), el más alto hasta la fecha, según ha informado este miércoles la entidad.
Con este resultado, dedicará más de 3.000 millones de euros de estos resultados (un 47% del beneficio atribuido reportado) a la remuneración a los accionistas.
Por un lado, propone elevar el dividendo en efectivo del año hasta 43 céntimos de euro brutos por acción (el más alto en 14 años y un 39% más que en 2021).
Tras los 12 céntimos por acción pagados en octubre, el banco someterá a la aprobación de la junta de accionistas un dividendo complementario de 31 céntimos por acción, que se abonará previsiblemente en abril.
Además, el banco pondrá en marcha un nuevo plan de recompra de acciones por valor de 422 millones de euros.
Esta remuneración es consistente con la política de retribución al accionista del grupo, que contempla repartir anualmente entre el 40% y el 50% del beneficio del ejercicio, con la opción de combinar el pago en efectivo con recompra de acciones.
El banco ha achacado el resultado logrado en 2022 al "fuerte" aumento de los ingresos, impulsados por el crecimiento a doble dígito del crédito (+13,3% en euros constantes).
Asimismo, el margen neto también registró un récord, con 14.130 millones de euros, un 29,2% más que en 2021.
"2022 ha sido un año de crecimiento para BBVA. Hemos alcanzado el mayor beneficio de nuestra historia, con una fuerte expansión del crédito y con grandes avances en nuestra estrategia, centrada en la digitalización, la innovación y la sostenibilidad. Mirando hacia adelante, y a pesar de la incertidumbre, en 2023 seguiremos creando oportunidades para todos y contribuyendo al crecimiento económico y social de los países donde estamos presentes", ha destacado el presidente de BBVA, Carlos Torres Vila.