El Banco de España ha advertido hoy de que la economía española ha seguido deteriorándose en el segundo trimestre del año a un ritmo "más intenso" del previsto, debido al retroceso del consumo privado. El primer Boletín Económico publicado bajo el nuevo mandato del gobernador, Luis María Linde recuerda que el producto interior bruto (PIB) retrocedió el 0,4 % en el primer trimestre, en tasa interanual, y resalta que en mayo continuaron cayendo los indicadores de confianza de los hogares y del comercio minorista.
Además, añade que las matriculaciones de vehículos han acelerado su descenso en mayo, al igual que las ventas al por menor y las de bienes y servicios de consumo de las grandes empresas. El organismo supervisor también destaca que la destrucción de empleo ha proseguido a un ritmo notable y continúa con la senda de "intensificación" iniciada en la segunda mitad de 2011.
El Banco de España inicia su capítulo sobre la evolución real de la economía española reconociendo que la economía española se ha visto "fuertemente" afectada en las últimas semanas por el recrudecimiento de las tensiones en los mercados financieros del área del euro, lo que llevó al Ejecutivo a solicitar ayuda financiera con el fin de sanear el sistema bancario español. Insiste en que este préstamo, que procederá de la Facilidad Europea para la Estabilidad Financiera (FEEF) o del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), "llevará aparejadas determinadas condiciones sobre el sistema financiero".
Sobre la situación macroeconómica, el organismo supervisor incide en la debilidad de la demanda de bienes de equipo en el segundo trimestre, en la caída de la producción industrial y en el comportamiento "desfavorable" de la inversión en construcción. A estos datos negativos añade el descenso de las exportaciones reales de bienes en abril, en tasa interanual, y de las importaciones, que "reflejan la debilidad de la demanda nacional", sobre todo por las caídas de compras de bienes de consumo duradero o de equipo.
El Banco de España también avanza con los datos correspondientes a abril que el crecimiento del pasivo de las administraciones públicas se ha estabilizado en tasa interanual y que hay una cierta acentuación en el ritmo de contracción de la deuda de los hogares y las sociedades y de sus activos financieros más líquidos.