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La Bolsa española ha conseguido mantener el nivel de los 9.500 pese a caer en la sesión el 0,57%, arrastrada por la tendencia negativa de casi toda Europa y los malos resultados de los bancos y de los grandes valores. El principal selectivo español, el IBEX 35, se ha dejado en la jornada de hoy 54,40 puntos, ese 0,57 %, hasta los 9.500,30 puntos, aunque ha roto con dos semanas consecutivas de pérdidas al subir el 1,30%.

En el balance anual, la Bolsa española ha reducido las ganancias al 1,58%. Pese a cerrar a la baja, la Bolsa española inició el día con leves ganancias. No obstante, poco después cambió de signo lastrada por el mal comportamiento de la banca y en sintonía con el mercado asiático donde Tokio se ha dejado un 0,58%; el índice CSI, que agrupa a las 300 mayores empresas cotizadas en Shanghai y Shenzhen, el 0,57%; y Hong Kong el 0,31%.

Los mercados asiáticos han terminado la jornada con pérdidas después de que ayer Wall Street registrara una tendencia mixta, aunque uno de sus principales indicadores, el Dow Jones, cerró en máximos.

Poco después de la apertura del IBEX 35, se conocía que la deuda del conjunto de las administraciones públicas españolas cerró 2016 en 1.105.627 millones, lo que equivale al 98,98% del PIB, por lo que se cumpliría el objetivo marcado por el Gobierno según datos del Banco de España. Pese a dichos datos, la prima de riesgo nacional ha cerrado al alza, en 133 puntos básicos, tras el alza del bono español.

Además, en una jornada en la que se ha conocido que la morosidad bancaria cerró 2016 a la baja, en el 9,11%, y que el superávit corriente de la UE alcanzó los 199.900 millones el año pasado, la Bolsa española fue profundizando en las pérdidas según transcurría la mañana.

Incluso, a mediodía, ya caía el 0,54%, y ponía en peligro los los 9.500 puntos -cota que finalmente mantuvo- arrastrada por la banca, los grandes valores y algunas compañías vinculadas al sector energético. También ha contribuido a la caída del mercado la apertura a la baja de Wall Street, que hoy se ha decantado por la tendencia negativa ante la recogida de beneficios, después de que el Dow Jones, sumara ayer su sexto récord consecutivo.

En Europa, la mayoría de los principales índices ha cerrado en pérdidas; París ha caído el 0,65%; y Milán, el 0,42%, mientras que Fráncfort ha cerrado plana. Londres ha ganado un 0,30%. Al terminar la sesión, el euro se ha depreciado hasta los 1,062 dólares, mientras que en el mercado de materias primas, el barril de petróleo Brent, el de referencia en Europa, ha bajado a los 55,46 dólares.

De vuelta al mercado español, los grandes valores han registrado pérdidas de forma generalizada, ya que Repsol ha caído el 1,94%; Santander, el 1,29%; BBVA, el 1,17%; Iberdrola, el 0,59%; Inditex, el 0,50%; y Telefónica, el 0,01%. Tras Repsol, Mapfre y Bankinter han sido las empresas con mayores pérdidas, con un 1,70% y un 1,67%, respectivamente.

En el lado contrario, Viscofan ha sido el valor más alcista, al subir el 2,93%, seguido de Cellnex, que se ha revalorizado el 2,14% tras anunciar un beneficio de 40 millones en 2016.