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El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha afirmado este viernes que la recuperación de la economía española es un hecho, pero ha advertido de que aún queda "camino por recorrer", al tiempo que ha insistido en que la prioridad debe ser la creación de empleo, por lo que ni el Gobierno ni el sector privado deben caer en la complacencia.

Durante su intervención ante la junta de accionistas que se celebra en Santander, el presidente del grupo ha manifestado que a día de hoy nadie duda de la recuperación de la economía española, "que ha salido de la recesión, comienza a generar empleo y se encamina en el año 2014 a un crecimiento de más de un 1%".

"Esta mejora de la situación responde además a las reformas estructurales importantes que ya están dando sus frutos", ha indicado Botín, quien ha añadido que España ha salido con una valoración "muy favorable" del programa de ayuda financiera de la Troika.

El directivo también ha destacado que el país cuenta ahora con un sistema financiero más sólido y competitivo, que posee una estructura más razonable, con menos entidades y más homogéneas. Así, ha precisado que se ha terminado con el sistema dual de bancos y cajas cuya forma de gobernanza dispar acentuó los problemas de la crisis española.

En este sentido, ha destacado que los 40.000 millones de euros que recibió España en ayudas fueron destinados a las cajas que estaban en dificultades. "Ninguno de los bancos españoles se ha beneficiado de estas ayudas", ha resaltado.

Desde su punto de vista, algo que ha contribuido de manera importante a la actual situación de España ha sido que se ha conseguido recuperar la competitividad perdida sin recurrir a la depreciación del tipo de cambio.

LA RECUPERACION NO ES SUFICIENTE PARA RECUPERAR RENTABILIDAD

Antes de que Botín iniciara su presentación, el consejero delegado de la entidad, Javier Marín, ha tomado la palabra y, tras hacer un repaso de los resultados del grupo en 2013, ha señalado que el entorno sigue siendo "complejo", aunque ya muestra signos de mejora.

Además, ha opinado que la recuperación económica "no será suficiente" para que el sector bancario vuelva a niveles de rentabilidad previos a 2008, ya que es necesario tener en cuenta el impacto estructural que la nueva normativa tendrá sobre la banca, dado que habrá más requerimientos de capital, unos ratios de liquidez más elevados y se encarecerá el pasivo, entre otras cosas.

Marín ha hecho hincapié en que el Santander cumple con todos los nuevos requisitos, por lo que superará con éxito los diferentes test de estrés que se realizarán a la banca europea a finales de año.

También ha afirmado que la entidad se encuentra "totalmente preparada" para iniciar una nueva fase de crecimiento de su resultado, lo que consolidará al grupo como "uno de los bancos líderes en el sector financiero internacional".