La Comisión Europea (CE) anunció la apertura de una investigación en profundidad sobre la compra de Air Europa por parte de IAG, al que pertenece Iberia, después de que el grupo aéreo optara por presentarle su propuesta de 'remedies' (concesiones) por esta operación en la llamada fase 2.
El grupo IAG, al que también pertenecen British Airways, Vueling, Aer Lingus y Level, informó hace una semana de que había decidido no presentar su propuesta de condiciones en la fase 1, que se inició el pasado 11 de diciembre y ha finalizado este miércoles, sino en la 2, en la que Bruselas dispone de plazos más largos para pronunciarse sobre la operación, concretamente de 90 días laborables.
Una vez finalizado el período de la fase 1, la CE ha anunciado el inicio de la fase 2, durante la cual hará una investigación en profundidad de la operación ante la sospecha de que podría reducir la competencia en varias rutas de corta y larga distancia tanto dentro como fuera de España.
"Queremos asegurarnos de que la operación no afecte negativamente a los precios o a la calidad de los servicios de transporte aéreo de pasajeros dentro y fuera de España", explicó en un comunicado la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario responsable de Competencia, Margrethe Vestager.
El departamento que dirige la danesa dispone ahora de plazo hasta el próximo 7 de junio para emitir un dictamen, aunque este período puede ser ampliado, si las partes lo consideran adecuado por tramos de 15 o 20 días.
Fuentes de Iberia han explicado que el anuncio de la CE sobre la apertura de esa investigación es el que esperaba el grupo, que presentará "pronto", aunque sin concretar aún una fecha, su propuesta de "remedies" en la que aportará soluciones para los problemas detectados en ciertas rutas por Bruselas.
La Comisión subraya que IAG y Air Europa son competidores "potentes y cercanos" y sospecha que la fusión reduciría la competencia en rutas nacionales españolas, especialmente en aquellas "en las que el tren de alta velocidad no ofrece una alternativa", así como en las rutas entre la península y Baleares y Canarias.
También cree que podría afectar a rutas de corta distancia que conectan Madrid con algunas de las "principales" ciudades europeas, Israel, Marruecos, Reino Unido o Suiza, puesto que ambas aerolíneas "ofrecen una conexión directa".
Asimismo, las autoridades comunitarias ven potenciales problemas en rutas de larga distancia entre Madrid y América del Norte y del Sur, un mercado en el que ambas se enfrentan a "pocos competidores con conexión sin escalas".
Además, la Comisión quiere analizar si la "sólida cartera" de franjas horarias que tienen las dos compañías -en especial en el aeropuerto de Madrid-Barajas- podría afectar a sus rivales, el efecto en conexiones indirectas hacia América del Sur y las consecuencias en rutas en las que otras aerolíneas dependen del acceso a la red nacional y de corta distancia de IAG o Air Europa.
La misma fuente de Iberia ha destacado que la propuesta de "remedies" que presentará IAG a la CE será "muy ambiciosa" y "cubrirá todas las necesidades de competencia".
La compañía ha reiterado, asimismo, su convencimiento de que "la operación es buena para los consumidores y buena para España ya que, entre otras cosas, reforzará el hub (centro de conexiones) de Madrid y fortalecerá la conectividad de nuestro país".