El presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva | EUROPA PRESS
(Actualizado

La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) ha advertido que el deterioro de la productividad de la pyme española "se empieza a cronificar" a tenor de lo observado en el cuarto trimestre de 2023, cuando la productividad descendió un 0,7% en tasa interanual y continuó distanciándose del nivel previo a la pandemia.

En su informe sobre la situación de la empresa española, Cepyme indica que el repunte de productividad que se produjo en 2021 "tan solo sirvió para compensar el gran desplome registrado en la pandemia".

"Lamentablemente, una vez estabilizada la actividad, la productividad ha recuperado su tendencia descendente iniciada en 2017 y ahora se sitúa ligeramente por debajo de la de 2015", asevera la patronal.

Y es que, pese al crecimiento de la actividad que se ha registrado en los últimos trimestres, este no ha sido suficiente para que la empresa entrañe una ganancia de productividad, sobre todo a la vista de otros indicadores como las ventas.

LAS VENTAS SE DESACELERAN

Pero además, Cepyme apunta que el comportamiento de las ventas y del empleo crecen, pero continúan en desaceleración, y la ligera reducción de los costes operativos, especialmente de la energía en el cuarto trimestre del año, no ha sido suficiente para mejorar la situación de las pymes españolas.

En concreto, las ventas de las pymes cerraron el año con un crecimiento del 3,5%, frente al 20,5% que se registraba hace cinco trimestres, en el segundo trimestre de 2022. Eliminando el efecto de la inflación, dice el documento, las ventas crecieron en el último trimestre de 2023 un 1,2%.

La ralentización de las ventas se conjuga con aumento de las plantillas del 2,7% en el caso de empresas medianas y del 2,1% en las pequeñas. Mientras tanto, los costes laborales encadenan 10 trimestres de subidas superiores al 5%.

Si bien los costes operativos caen en el cuarto trimestre en términos interanuales (-0,7%) gracias al comportamiento del componente energético (- 22,6%), el coste de los servicios utilizados por las pymes se acelera (3,1%) y los costes laborales siguen creciendo con fuerza (5,3%).

En el cuarto trimestre, el aumento interanual del coste laboral fue del 5,3%, el más alto de los cinco últimos trimestres. Además, desde el cuarto trimestre de 2021 los costes laborales subieron un 11% para las firmas pequeñas y un 10% para las medianas.

MAYOR FALTA DEL CREDITO

A todo esto se suman los problemas relacionados con la mayor escasez del crédito, pues la proporción de nuevos préstamos sobre ventas es menor que en ejercicios anteriores y el tipo de interés medio a pymes ha superado el 5% por primera vez desde 2009, del 5,01% en el cuarto trimestre de 2023, frente al 3,05% registrado un año antes.

Por otra parte, dice el informe, el contexto de mayor inflación se ha traducido en una restricción del crédito comercial entre empresas. Este se situó en el cuatro trimestre al 55,2% de las ventas de las pymes, porcentaje que desciende por cuarto trimestre consecutivo.

Como consecuencia, el esfuerzo financiero de las pymes vinculado a la deuda comercial ascendió a 2.630 millones de euros en el cuarto trimestre, lo que supone un alza del 50,1% interanual. Cepyme señala que esto se traduce para una pequeña empresa en un esfuerzo financiero de 5.300 euros anualizados, casi el doble que a cierre de 2021; y de 40.200 euros para las firmas medianas frente a los 16.800 en el mismo periodo.

No obstante, a juicio de Cepyme resulta positiva la reducción del endeudamiento total de las pymes, que prosigue la tendencia descendente que inició en 2008. La ratio de endeudamiento se sitúa en el 82,3%, el menor desde 1999.

CRECEN LOS CONCURSOS

En cuanto al número de concursos, el cuarto trimestre arrojó una cifra de 2.083 pymes concursadas, el tercer peor dato trimestral desde 2013 y un 4,2% interanual más, de las cuales 2.050 fueron firmas pequeñas y el resto medianas.

Cepyme muestra su preocupación por el hecho de que el número de concursos haya sido superior al del cuarto trimestre de 2022, ya que entonces no se había disipado aún el decalaje derivado de la moratoria concursal por la pandemia ni se registraba una acumulación extraordinaria de casos como la posterior a la huelga de letrados de la Administración de Justicia acaecida en 2023.

En conclusión, el informe de Cepyme anotó un debilitamiento en el cuarto trimestre de 2023 con relación a los tres anteriores marcando la menor cota del pasado ejercicio.