El FMI vuelve a revisar al alza las previsiones de España hasta 2,6% en 2017

El Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió hoy a revisar al alza sus previsiones económicas para España, hasta el 2,6 % en 2017, tres décimas más de lo anticipado en enero, y mantiene su pronóstico del 2,1% para 2018. El nuevo informe de "Perspectivas Económicas Globales" del Fondo apunta que, aunque la actividad económica en España comienza a moderarse tras el crecimiento del 3,2% registrado en 2016, continúa su expansión por encima de la zona euro, que se prevé sea del 1,7 % en 2017, una décima más de lo calculado tres meses atrás, y sin cambios del 1,6% en 2018.

La mejora de las previsiones en España responde a una "fuerte demanda interna" y al contexto de recuperación en la zona euro respaldado "por una orientación fiscal levemente expansiva, condiciones financieras acomodaticias y un euro más débil", señaló el documento, presentado al inicio de la reunión de primavera del FMI y el Banco Mundial (BM) que se celebra esta semana en Washington.

España crecerá 2,6% este año y 2,1% el próximo, por encima de Alemania, que lo hará un 1,6% (una décima más que lo calculado en enero) en 2017 y un 1,5% en 2018; Francia un 1,4 % (una décima más que en enero) y 1,6 %, respectivamente, e Italia un 0,8 %, los dos próximos años.

La estimación de la institución financiera del 2,6 % para este año es levemente superior a la pronosticada por el Gobierno español, que en sus presupuestos apunta a una expansión del 2,5 % en 2017.

El Fondo prevé, además, que esta sostenida expansión de la economía de España permita reducir los elevados niveles de desempleo, que se calcula se sitúen en el 17,7 % al final de este año y en el 16,6 % el próximo, tras el 19,6 % de 2016. Ese porcentaje, sin embargo, es todavía muy superior a la media de la zona euro, cuyo desempleo se calcula cierre este año en el 9,4 %.

RIESGOS EN EL HORIZONTE

A medio plazo, la institución dirigida por Christine Lagarde alertó sobre "las perspectivas poco halagüeñas para la zona euro debido a la débil productividad, factores demográficos desfavorables y en algunos países problemas aún no resueltos de sobreendeudamiento público y privado".

Para impulsar el crecimiento, el FMI vuelve a sus clásicas recomendaciones: completar la unión bancaria, saneamiento de balances bancarios, inversión en infraestructura y reformas del mercado laboral y de productos.

Defendió, además, la necesidad de que el Banco Central Europeo (BCE) mantenga su política monetaria expansiva dada la debilidad estructural en la economía de la moneda común.

Por otro lado, apuntó que los riesgos deflacionarios se han disipado en la zona euro y vaticina que la inflación se está "reavivando" y será del 1,7 % en 2017, después del 0,2 % de 2016.

Uno de los temas que serán tratados en profundidad es el nuevo rescate financiero a Grecia, cuya maltrecha economía se espera que vuelva a crecer en 2017 con una estimación del 2,2 % por parte del Fondo. El FMI, que aún no ha confirmado si participará en el tercer rescate a Atenas por valor de 86.000 millones de euros, considera fundamental que el pacto incluya un proceso de alivio de deuda, algo a lo que los acreedores europeos se muestran dispuestos solo después de que Atenas haya cumplido con el calendario de reformas.

Finalmente, el informe de cabecera del Fondo señala como "uno de los principales desafíos europeos conducir con éxito la salida del Reino Unido de la Unión Europea", el proceso conocido como "brexit", y "negociar las nuevas condiciones de las relaciones económicas" entre los socios europeos y Londres. "Los efectos adversos" para la economía del Reino Unido, indica, "serían inferiores si las nuevas condiciones imponen un límite a las nuevas barreras económicas".