Beneficios "extraordinarios, enormes, descomunales” de las eléctricas por la guerra de Ucrania, según Facua
Solicitan un tope de 50 euros el MWh y denuncian que las eléctricas se están “forrando” por la guerra en Ucrania
Responsabilizan a Europa de haber "impuesto" un sistema de subasta que favorece la especulación con el precio de la energía
Facua-Consumidores en Acción exigió este lunes el establecimiento por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de un tope máximo de 50 euros el megavatio hora de luz para las ofertas en la subasta diaria y denunció que “todas” las compañías eléctricas se están “forrando” por la guerra en Ucrania, se están "frotando las manos" con la invasión y con el alza del gas y están obteniendo beneficios “extraordinarios, enormes, descomunales”, precisamente por esta “coyuntura”.
Así lo señaló el secretario general de Facua, Rubén Sánchez, en una rueda de prensa en la que expuso las principales reivindicaciones de Facua para reducir la factura de la luz del usuario medio, que, según sus cálculos, puede superar los 250 euros si se mantiene durante un mes un precio medio del megavatio hora de electricidad que este lunes ha batido un récord alcanzando los 442,54 euros.
En este sentido, llamó a “reaccionar ya” ante la coyuntura actual con medidas “de urgencia” dado que, con el precio de este lunes en España, que marca un “máximo histórico”, si se mantuviera, la factura del usuario medio multiplicaría “casi por cuatro” la de marzo del año pasado, si bien aventuró que “va a subir más” y que, “en los próximos días, mañana o pasado", va a superarse los 500 euros el megavatio hora, al tiempo que lamentó que “no hay ninguna normativa en España que lo limite, todo lo contrario”.
Según su punto de vista, “dentro de unos márgenes razonables”, el Gobierno debería “intervenir” y “cambiar” la fórmula tarifaria de fijación de precios en la subasta “de manera coyuntural y teniendo en cuenta la situación extraordinaria que estamos viviendo, agravada por la crisis de Ucrania” y “plantearse” que la CNMC volviera a poner “un tope al precio máximo de la subasta diaria” de 50 euros el megavatio hora, lo que, según su punto de vista, provocaría “una drástica bajada de esa descomunal tarifa eléctrica”.
Al mismo tiempo, aseveró que “absolutamente” todas las tecnologías de generación eléctrica salvo las dependientes del gas “ganarían mucho dinero" y que las térmicas irían a pérdidas y podrían ser “compensadas” con dinero proveniente del sistema para “garantizar que siguieran teniendo beneficios”.
Y ha añadido, “pero no esos beneficios tan desproporcionados que pueden estar teniendo hoy en día y que, a la par, provocan beneficios bestiales en el resto de tecnologías que producen la electricidad muy por debajo, generalmente, de los 30 euros el megavatio hora”, espetó.
Situación grave
Sánchez tildó de “extraordinariamente grave” lo que está ocurriendo con las tarifas eléctricas en toda la UE, dado que, a su juicio, todos los Estados miembro están marcando precios “absolutamente desorbitados, por encima de los 400 euros el megavatio hora”, atribuyendo dicha circunstancia a una “coyuntura extraordinaria” derivada de la guerra en Ucrania, pero también a que, desde hace “muchos meses” el gas se está “utilizando” para “especular enormemente” en el sector eléctrico y, “muy especialmente”, en España.
A este respecto, estimó que en 2021 en el país se batieron “todos los récords” y se pagó “la factura más alta de la historia sin que fuese necesario”. “Porque ha habido eléctricas que no utilizan gas para la producción y que se han beneficiado enormemente de esta coyuntura”, apostilló, recordando que el modelo de subasta “impuesto” por la Comisión Europea, plantea que la tecnología más cara, cuando puja en la subasta, determina el precio del resto de tecnologías, por lo que, hoy, “quien esté produciendo a tres o a diez euros el megavatios hora, al final, cobra 442,54 euros el megavatio hora de media”.
“El precio lo puede marcar el gas unos días, pero otros días pueden las hidroeléctricas aprovecharse de la coyuntura y entrar en la subasta al precio que hubiera marcado el gas si también hubiera entrado en la subasta, porque el gas no todos los días entra en la subasta de nuestro mercado diario eléctrico”, abundó, para lamentar que en 2021 las grandes centrales hidroeléctricas “estaban jugando a especular”.
"Disparate" y "estafa"
Para Sánchez se trata de un “disparate y una auténtica estafa a los consumidores que tiene que corregirse de una vez” por parte de la Comisión Europea, a la que urgió a “dejar de imponer una fórmula de subasta absolutamente malévola y beneficiosa para grandes eléctricas en cada uno de los Estados miembro”, permitir que los Estados miembro pongan "límites razonables a las ofertas en las subastas diarias, dejar de "plegarse" a los intereses de las grandes energéticas y abandonar la "demagogia”, al estimar que sus propuestas “no sirven absolutamente de nada” ante un modelo de subasta en el que el gas determina los precios “por la especulación”.
Sánchez juzgó un “absoluto disparate” que hoy las eléctricas “puedan llegar a pujar hasta a 3.000 euros el megavatio hora de electricidad, cuando hasta comienzos de julio de 2021 podían hacerlo a un máximo de 180 euros”, precio fijado en España desde 1998.
El secretario general de Facua defendió que esta fórmula “no tiene absolutamente ningún sentido” en un mercado que actuara “con un criterio razonable y con reglas proporcionales a los costes reales de generación”, dado que, apuntó, las eléctricas, con excepción de las térmicas, que dependen del gas, “no producen, generalmente, por encima de los 30 euros el megavatio hora”.
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