El Consejo de Ministros ha nombrado hoy consejero del Banco de España a Luis María Linde, exdirector general de la entidad, según ha informado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, al término de la reunión del Ejecutivo. "Se trata de una persona con experiencia acreditada en el conocimiento de esta institución", dijo la vicepresidenta en rueda de prensa.
Según fuentes del sector consultadas por Efe, este nombramiento sitúa a Linde entre los posibles candidatos a sustituir al gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, cuando acabe su mandato a mediados de julio.
Como consejero, Linde sólo estaría en el puesto hasta 2015, ya que ese año cumple 70 años, que es la edad máxima para ejercer ese cargo, al igual que ocurre con el caso del gobernador y subgobernador, lo que significa que no podrá completar su mandato de seis años.
Linde ocupará la vacante de Vicente Salas, premio Jaume I de Economía, y que fue nombrado consejero del Banco de España en 2006 a propuesta del PSOE, con lo que concluye ahora su mandato.
De esta manera, Luis María Linde regresa a la entidad donde ocupó el cargo de director general del Departamento de Internacional entre 1987 y 2000. Anteriormente fue subdirector general y jefe de Operaciones Exteriores de la institución.
En 2005, dio el salto al exterior al ser nombrado director ejecutivo de España en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con sede en Washington.
Actualmente es asesor para Asuntos Internacionales del Banco de España.
Su nombre ya se barajaba en el sector como posible candidato para suceder a Fernández Ordóñez como gobernador del Banco de España a partir de julio próximo.
Otros nombres que se escuchan son el del director de Asuntos Financieros del Fondo Monetario Internacional (FMI), José Viñals, o el del director de asuntos jurídicos del Banco Central Europeo (BCE), Antonio Sainz de Vicuña.
En las últimas semanas, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha explicado que le gustaría alcanzar un consenso con la oposición sobre el sustituto de Fernández Ordóñez.
El ministro reconoció incluso que ya tenía en mente algunos nombres, que no identificó, aunque sí dejó claro que quiere que sean personas de "reconocido prestigio" dentro y fuera de España, y sin perfil político.