Se cumplen 90 años del primer vuelo comercial de Iberia fue un Barcelona- Madrid. Los billetes costaban algo más de 150 pesetas, casi un euro. En su primer mes de operación los Rohrbach RoVIII de Iberia hicieron 57 vuelos entre Madrid y Barcelona.
UN AVIÓN CON EL NOMBRE DE SU FUNDADOR
Iberia celebra el 90 aniversario del inicio de sus vuelos, bautizando con el nombre de su fundador Horacio Echevarrieta uno de sus aviones de la flota, en homenaje a su primer presidente y como colofón a todo un año 2017 con diversas actividades para conmemorar que el 14 de diciembre de 1927 un Rohrbach Roland despegada de Barcelona con destino al aeródromo de Cuatro Vientos.
Al acto inaugural contó con la presencia de Alfonso X y de Horacio Echevarrieta, fundador y primer presidente de la aerolínea española, una de las compañías aéreas más antiguas del mundo.
El precio del billete era de 163 pesetas por trayecto y de 300 pesetas por un billete de ida y vuelta de un vuelo con una duración de tres horas y media. La capacidad del avión era de diez pasajeros y sus aviones eran trimotores con asientos de mimbre. Sus vuelos eran diarios, excepto los domingos, que despegaba de la capital a las 8.00 horas de la mañana y desde Barcelona a las 12.00 horas del mediodía.
En su primer mes de actividad realizó 57 vuelos y transportó a 287 pasajeros. La conexión aérea Madrid-Barcelona, conocida hoy como 'puente aéreo', también forma parte de la historia de la compañía y de la aviación española: nació en 1974 y marcó un hito en las comunicaciones aéreas. Desde su nacimiento, casi 900 millones de personas han viajado ya con Iberia.
90 AÑOS DESPUÉS
Iberia confía en despedir el año 2017 como lo arrancó, como la aerolínea más puntual del mundo, si toda va según sus pronósticos y diciembre "no se tuerce". "Estamos en un mercado donde es muy difícil competir a diario", ha asegurado recientemente su actual presidente, Luis Gallego.
En noviembre, logró la segunda posición desde el sexto al que retrocedió en la clasificación de la consultora independiente FlightStats, en un contexto de alta competencia y turbulencias por interrupciones en las operaciones en toda Europa por diversos factores.
Gallego, al frente de los mandos de Iberia desde enero de 2014, tuvo su primer contacto con la aviación a los 13 años cuando acompañó a su padre a un viaje a Seattle, no hubiera imaginado entones que presidiría una compañía aérea.
El actual presidente de Iberia es un hombre 'de la casa' dentro del Grupo Iberia, al que se le confió primero Iberia Express, tras su paso por Air Nostrum y la denominada 'nueva' Vueling, surgida de la fusión de la compañía original con Clickair, de cuyo equipo fundacional también formó parte.
Con su llegada en 2014 llegó la 'paz social' con la firma de un pacto histórico con los sindicatos representantes de sus trabajadores, que puso fin a años de conflictos. En 2012 Iberia perdía un millón de euros al día, en 2013 redujo las pérdidas a la mitad y en 2015 ya era rentable.
Tras un profundo proceso de transformación, tres EREs voluntarios y el diseño de plan de futuro, Gallego se muestra abierto a mejoras salariales, eso sí, "sin deteriorar el crecimiento de la compañía", y vinculadas a la productividad. No tendría sentido volver a la estructura de costes pesada que puso en riesgo su supervivencia. Sobre la mesa la amenaza de una huelga en El Prat.
PLAN DE FUTURO
Iberia coge impulso de cara a 2018 y acelera su ritmo de crecimiento "agresivo", con la previsión de aumentar un 8% su oferta anual en un ambicioso plan estratégico, eligiendo selectivamente las nuevas rutas y sin olvidar los rendimientos exigidos por IAG.
Más presión para el equipo comercial que sigue trabajando en la digitalización y en la mejora del producto, también en el puente aéreo, ahora renovado gracias al acuerdo con Vueling. Satisfecho del camino recorrido, pero consciente de las millas que quedarán por volar Gallego resume la filosofía actual de Iberia en el que ya es su lema: 'Cada día es el primer día'.