Méndez y Toxo piden al Gobierno que "reflexione" tras las masivas manifestaciones

  • Piden una negociación "en paralelo" al trámite parlamentario
  • Rubalcaba ve la reforma laboral de "injusta e innecesaria"

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha advertido este lunes al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que la reforma laboral no es ni justa ni necesaria ni buena, sino "injusta, innecesaria e ineficaz", porque no ayudará a salir de la crisis, sino que, dado que "abarata mucho el despido", generará más despidos y hará "que todo vaya todavía peor".En una entrevista en RNE, el líder socialista ha reaccionado con sorpresa el discurso de Rajoy en la clausura del Congreso del PP celebrado este fin de semana en Sevilla, en primer lugar porque parece haberse "caído del caballo" y haber descubierto ahora que la crisis es internacional, cuando se pasó la campaña diciendo que "todo era un problema de confianza" y que bastaría con que él llegase al Gobierno para que se resolviesen los problemas.

Y en segundo lugar, le ha reprochado que, además de augurar a España "todos los males del infierno", como si fuese un "comentarista político" en vez del presidente del Gobierno y, tome medidas como la reforma laboral, que harán "que todo vaya todavía peor". "Es un discurso muy animoso -ha ironizado--, perfectamente indefendible".Rubalcaba ha pedido al Gobierno que, en lugar de la reforma laboral que acaba de aprobar, aplique el acuerdo de limitación de salarios y de flexibilidad que alcanzaron empresarios y sindicatos y que, a su juicio, demuestra que los agentes sociales tienen un "alto grado de responsabilidad". En este punto, ha aprovechado para defender a los sindicatos frente a quienes les acusan de irresponsables por defender a los que tienen empleo: "Ahora parece que los que tienen trabajo son los culpables".

De cara a la tramitación de la reforma como proyecto de ley, ha adelantado que el PSOE tratará de sacar adelante propuestas que ya hizo en las elecciones. En concreto, se ha mostrado de acuerdo con el punto de la reforma que abarata para los empresarios las cotizaciones a la Seguridad Social de los nuevos empleados, pero ha rechazado el periodo de prueba de 364 días, que es "despido libre en un año".Rubalcaba ha acusado al Gobierno de utilizar la crisis "como excusa para hacer un ajuste ideológico" y poner sobre el papel el modelo que defiende la derecha "con y sin crisis", que consiste en "cargarse el modelo de relaciones laborales".

REFLEXIÓN TRAS LAS MASIVAS MANIFESTACIONES

Los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, han confirmado que el Gobierno no se ha puesto en contacto con los sindicatos tras las manifestaciones contra la reforma laboral del pasado domingo, "de las más masivas de la historia de la democracia", en su opinión. Si bien, le han pedido que "reflexione" porque "aún tiene tiempo" para abrir un proceso de negociación con los agentes sociales "paralelo" al trámite parlamentario que evite una "escalada" de la conflictividad social.

Sobre si esa escalada puede acabar en una huelga general, han indicado que antes de plantear esta posibilidad "hay que esperar a que el Gobierno de una respuesta". "A partir de ahí, tomaremos las determinaciones que consideremos oportunas", ha señalado Méndez.

Así lo han indicado en una rueda de prensa para presentar la plataforma en defensa del Estado del bienestar y los servicios públicos, compuesta por CCOO, UGT y 40 asociaciones y organizaciones sociales, en la que, sin excesivo triunfalismo, han puesto en valor la gran afluencia registrada ayer en las manifestaciones convocadas para "reequilibrar" la reforma laboral. Para Méndez, las movilizaciones convocadas ayer en las 57 principales ciudades de España tuvieron una "afluencia masiva y democrática que puede considerarse de las más altas de la historia de la democracia española", y reflejaron un doble sentimiento que reina en la sociedad: "La inseguridad, pero no la resignación". "La gente no se quiere quedar en casa, quiere coprotagonizar con los poderes públicos" la salida de la crisis, señaló.

Precisamente, la aprobación de la reforma laboral por la vía del decreto es lo que hace "plenamente justificadas" estas movilizaciones, en opinión de Toxo, quien las consideró "las más importantes en muchísimo tiempo" en términos de asistencia, así como una carga extra de "responsabilidad" para los sindicatos.

HAY TIEMPO PARA EVITAR MAS CONFLICTIVIDAD

Con las cifras de asistencia en las manifestaciones sobre la mesa, Toxo confió en que "el Gobierno lea bien lo que sucedió ayer en las 57 ciudades de españolas y evite a España de una escalada de movilizaciones que puede producirse si insisten en sostener la reforma laboral y no enmendarla"."Hay posibilidades de modificar en todo o en parte el contenido del real decreto a través de las enmiendas que se introduzcan en el Congreso y el Senado", añadió, para concretar que los sindicatos apuestan por que se abra "en paralelo una mesa de negociación con los interlocutores sociales" para que sus conclusiones se introduzcan en el proyecto de Ley vía enmiendas.

Por lo pronto, los sindicatos seguirán reuniéndose esta semana con los Grupos Parlamentarios para influir en la reforma y mantendrán un encuentro con el Grupo Popular el próximo jueves en una reunión en la que le presentarán "alternativas distintas" a su real decreto.

En este punto, Méndez aseguró que el Gobierno debe "reflexionar" y plantear "cauces para trabajar unidos", Gobierno y agentes sociales, en lugar de ahondar en la "desgraciada decisión" de gobernar "a golpe de decreto". En este sentido, ha insistido en que es preciso abrir un proceso de diálogo social para "una reformulación" de la reforma laboral que "devuelva el reequilibrio y la armonía a la norma".