Montero apunta que los Presupuestos "probablemente" no agotarán todo el margen de déficit
En el Senado tras defender la senda de estabilidad
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado este miércoles que los futuros presupuestos de 2024 "probablemente" no agotarán todo el margen de déficit que les permite la senda de estabilidad remitida a Bruselas en abril del pasado año, un 3 % del PIB.
En declaraciones a los medios en el Senado tras defender la senda de estabilidad, que por segunda vez será rechazada por la mayoría absoluta del PP y Vox, Montero ha insistido en que trabaja con los grupos políticos "para que haya Presupuestos y traerlos lo antes posible a las Cámaras".
A falta de una senda de estabilidad aprobada en las Cortes, el Gobierno seguirá el procedimiento marcado por un informe de la Abogacía del Estado que, ha asegurado la vicepresidenta, se hará público muy pronto.
De acuerdo a este informe, una vez presentadas y tramitadas sin éxito dos sendas de estabilidad, entran en vigor los objetivos de déficit y deuda remitidos a Bruselas en abril del pasado año, que ya cuentan con el aval de la Comisión Europea.
Esta senda establece el mismo objetivo de déficit para 2024 que será rechazado este miércoles, un 3 % del PIB, pero un reparto distinto: un 3 % de déficit para la administración central (en lugar de 2,7 %), equilibrio para las comunidades autónomas (en lugar de una décima de déficit) y dos décimas de superávit para las administraciones locales (en lugar de equilibrio). La Seguridad Social tiene dos décimas de déficit en ambos casos.
La nueva senda daba un mayor margen fiscal a comunidades autónomas y ayuntamientos, ha apuntado Montero, de manera que si el Senado finalmente la rechaza "esa capacidad revierte en el Estado", algo que considera un "tiro en el pie" por parte del PP.
En cualquier caso, ha defendido que el futuro proyecto presupuestario para 2024 no prevé agotar ese nuevo margen.
El límite de gasto no financiero o techo de gasto presentado este miércoles, que no se somete a votación, está basado en un déficit para el Estado del 2,7 % del PIB y asciende a un máximo histórico de 199.120 millones de euros una vez incluidos los fondos europeos, un 0,5 % más que en 2023.
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