| Telemadrid
(Actualizado

La crítica situación de Grecia un año después de recibir la ayuda internacional, lejos de remitir, se ha agravado y amenaza con provocar nuevas divisiones en el seno de la Unión Europea respecto a la posibilidad de conceder créditos adicionales al país, más allá del rescate de 110.000 millones.

El reconocimiento de que Grecia no podrá comenzar a financiarse en el mercado a partir de 2012, como había sido acordado, debido a los prohibitivos intereses que se siguen pagando por su deuda, ha abierto el debate sobre cuáles son los pasos a seguir para evitar que este nuevo capítulo en la crisis fiscal de la zona euro desemboque en un drama de peores consecuencias.

Los ministros de Finanzas de Francia, Italia, Alemania, España y Grecia se reunieron el pasado viernes en Luxemburgo con el presidente del Banco Central Europeo, el presidente del Eurogrupo y el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios para tratar el asunto.

El encuentro, que había sido organizado por Francia y Luxemburgo como una cita secreta, salió a la luz debido a una información publicada en el portal digital del semanario "Der Spiegel", en la que se sostenía que Grecia barajaba abandonar el euro.

El vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, ha asegurado hoy que "nadie va a abandonar el euro", en alusión los rumores sobre Grecia, y ha considerado lógico que las instituciones europeas y los países involucrados en los planes de rescate pidan explicaciones ante posibles nuevos rescates.

En declaraciones a los periodistas tras el acto con el que se conmemora hoy el Día de Europa en Madrid, Almunia ha pedido a los mercados financieros que miren a los fundamentos y ha señalado que Grecia, Irlanda y Portugal están haciendo el esfuerzo necesario para salir de la crisis.

Preguntado por la situación española, Almunia ha afirmado que "España está mucho mejor", porque su economía tiene más recursos y es más equilibrada.

En este sentido, ha afirmado que España y el Gobierno están haciendo las reformas y ajustes necesarios, "no ha hecho falta llegar hasta el borde del precipicio" y lo que "hay que hacer es seguir por esa línea sin demagogia, tenacidad y rigor".

Sobre si la UE tiene un plan B ante la posibilidad de que algún Estado deje el euro, Almunia ha precisado que "nadie va a abandonar la moneda y esa decisión sería completamente ignorar las insoportables dificultades" de abandonar una moneda que ofrece ventajas.

Preguntado por las reticencias de algunos países como Reino Unido o Finlandia a participar en más rescates, Almunia ha dicho que es lógico que países que quieren avalar esas ayudas quieran ver con más detalle la situación.

En este aspecto, ha asegurado que en la zona euro hay gran solidaridad.

Ha precisado que la UE coordina el apoyo financiero a Grecia a cambio de la aplicación del programa de ajustes comprometido por su Gobierno, que está haciendo un esfuerzo muy importante y hay que ayudarle exigiéndole también que cumpla con sus compromisos.

Sobre los ataques al euro ha dicho que los mercados financieros y de cambio son volátiles desde el inicio de la crisis y cada vez que hay noticias falsas reaccionan en esa dirección.