Una jueza de Estados Unidos obliga a Elon Musk a cerrar la compra de Twitter antes del 28 de octubre

Una jueza de Estados Unidos da de plazo a Elon Musk hasta el 28 de octubre para cerrar la compra de la red social Twitter. Esta será la única alternativa para evitar la celebración de un juicio.

Poco antes, el director ejecutivo de Tesla había solicitado la suspensión del proceso con el que Twitter quiere forzar a Musk a comprar la compañía por los 44.000 millones de dólares acordados, con el objetivo de cerrar los últimos detalles.

Los abogados de Musk remitieron un escrito al tribunal encargado de este caso para alegar que no existía motivo para seguir adelante con el proceso. Aseguraban que seguir con la batalla legal podría poner en peligro la operación de compra por los 54.200 millones de dólares acordados.

En el documento, la defensa de Musk explicaba que la fecha prevista para la adquisición se completará alrededor del 28 de octubre, una vez que el multimillonario haya obtenido la financiación necesaria para la compra.

De momento, Twitter se ha negado a retirar su demanda y la jueza encargada del caso, Kathaleen McCormick, confirmó que los preparativos del juicio seguían adelante. Sin embargo, la defensa de Musk redactó un escrito contra la red social por su decisión de continuar con la batalla legal. Además, insisten en que no hay motivos para pensar que el hombre más rico del mundo no va a obtener financiación para completar la operación.

Insisten en que seguir adelante con el juicio sería un "enorme desperdicio de recursos" que "socavará la capacidad de las partes para cerrar la transacción" y que podría dejar la operación "en el limbo". De tal forma que los accionistas de Twitter recibirían su dinero mucho más tarde.

Twitter no tardó en responder y, en otro escrito al tribunal, se opuso a la solicitud de Musk, dejando claro que no se fía de las últimas promesas del empresario. La red social acusó a Musk de negarse a dar una fecha definitiva para completar la operación y dijo que la propuesta para suspender el juicio es "una invitación para más jugarretas y retrasos".

Según los analistas, la pelea entre Musk y Twitter ha dañado la imagen, el valor de la red social y la coyuntura económica, por lo que los bancos podrían ser reticentes a poner el dinero necesario.