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La incertidumbre sobre la situación de Grecia y el temor a un contagio de los problemas del banco franco-belga Dexia motivaron hoy fuertes caídas en las bolsas europeas, que al final fueron frenadas por la disposición de la FED de tomar nuevas medidas para reactivar la economía de EEUU.

Antes de conocerse que la Reserva Federal (FED) está preparada para tomar medidas que ayuden a la recuperación económica, las bolsas europeas registraban pérdidas de más del 3 %.

Una caída que era consecuencia de la preocupación que existe en el mercado por la situación de Grecia y por los efectos que esto puede tener en las entidades financieras, como en el caso del banco Dexia que tiene problemas de liquidez por su exposición a la deuda del país heleno.

Pese a ello, las palabras del presidente de la Reserva Federal (FED), Ben Bernanke, de que el banco central estadounidense estaría preparado para aplicar nuevas medidas si es necesario, infundió confianza en los mercados que reaccionaron reduciendo las pérdidas bursátiles.

Al final de la sesión, la Bolsa de Milán cayó el 2,72 %; la de París, el 2,61 % y la española, el 1,54 %.

La Bolsa de Londres perdió el 2,58 % y la de Fráncfort, el 2,98 por ciento.

Las bolsas europeas ya comenzaron la sesión de hoy con importantes pérdidas en un ambiente de pesimismo ante la posibilidad de que el banco Dexia tenga que volver a ser rescatado por las instituciones públicas por sus problemas de liquidez, debido a su exposición a la deuda griega.

Y ello pese a que Dexia obtuvo una de las mejores calificaciones en las pruebas de resistencia a las que se sometió la banca europea y que fueron publicadas el pasado junio.

Los mercados reaccionaron temerosos a que la situación de Dexia se contagie a otros bancos europeos, mientras el Gobierno belga informó de la celebración, hoy mismo, de una reunión de urgencia para tratar la situación de la entidad.

Aunque las miradas se centraron hoy en la situación del banco, los inversores no pasaban por alto la información que llegaba desde Grecia, donde el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, admitió que el país cuenta con fondos hasta mediados de noviembre para cubrir sus obligaciones, mientras espera tener acceso a los 8.000 millones de euros del sexto tramo del rescate..

Venizelos insistió además en que Grecia puede tener dificultades para cumplir con los objetivos de reducción del déficit.

Por si fuera poco, el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, pronosticó hoy en su última audiencia ante el Parlamento Europeo un "moderado crecimiento del PIB" de cara a los últimos meses de este año.

También la agencia de calificación de riesgos Standard & Poor's (S&P) rebajó su previsión de crecimiento para la zona del euro en 2012 del 1,5 al 1,1 %.

La banca ha sido el sector más castigado en las bolsas europeas.

En concreto, las acciones de Dexia, que llegaron a perder el 33 %, redujeron las pérdidas al 22,46 % al cierre del mercado.

Barclays también perdió el 7,62 % y Deutsche Bank, el 4,31 %, después de que revisara a la baja sus pronósticos de beneficio para 2011 y de anunciar que prevé reducir 500 empleos en la división de banca de inversión en el cuarto trimestre de 2011 y en el primer trimestre de 2012.

Otra entidad, Lloyd's cayó el 4,95 % y Royal Bank, el 4,14 %.

Por su parte, los bancos franceses, Credit Agricole y BNP Paribas retrocedieron el 6,5 % y el 5,14 %, respectivamente.

Societé Générale también bajó, el 4,9 %, en tanto que los españoles Santander y BBVA perdieron el 1,53 % y el 1,06 %, respectivamente.