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Arranca una de las peores cuestas de enero para el bolsillo de las familias españolas. Tras los pocos excesos que se han cometido durante las pasasdas fiestas ahora toca apretarse el cinturón. Las familias piden al Gobierno que al igual que ellos, también recorte el gasto y aumente las ayudas para poder superar la crisis. Según una encuesta realizada por la consultora GAD3 para The Family Watch la mayoría de los españoles afronta la crisis reduciendo sus gastos supérfluos, retrasando otros como el cambio de coche, la compra de una televisión, la reforma de una casa o suprimiendo las salidas para comer o cenar fuera.

Las familias españolas consideran que para salir de la crisis el Gobierno debería recortar altos cargos (94%), reducir el gasto público (77%) y bajar los impuestos (61%). No están de acuerdo en subir los impuestos ni en bajar el sueldo a los funcionarios o congelar las pensiones.

La opinión está dividida sobre la posibilidad de que el nuevo Gobierno introduzca mejoras en política familiar, el 43% de los encuestados así lo esperan frente a un 41% que no. La practica totalidad de los entrevistados considera que lo que ayudaría a las familias en España sería en primer lugar la implantación de políticas de concicilación familiar y laboral (91%), el fomento del alquiler y de ayudas a la vivienda (90%) y el aumento del número de becas para estudios (88%).