El 75% de los productos de la cesta de la compra se encareció en 2021
Electricidad y combustibles, los que más subieron
REDACCIÓN/AGENCIAS
Tres de cada cuatro productos y servicios incluidos en la cesta de la compra diseñada para calcular el IPC aumentaron de precio en 2021 respecto al ejercicio anterior. La electricidad y los combustibles fueron líderes de las subidas, y el sector turístico y la telefonía móvil a la cabeza de las bajadas.
Así se desprende del análisis de los datos pormenorizados publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la inflación media del año, que se situó finalmente en el 3,1 %, su valor más alto en la última década. El citado indicador no superaba esa cifra desde 2011 (3,2 %), cuando España todavía se encontraba inmersa en la crisis financiera.
La electricidad subió un 35,6%
De las 221 subclases en que se estructura el IPC (que a su vez engloban un total de 479 artículos), en 165 se registraron incrementos de precio en comparación con 2020, es decir, un 75 % del total.
La electricidad tiró hacia arriba los precios con un alza media del 35,6 %, un factor clave con un gran efecto multiplicador debido a que provocó un incremento generalizado del recibo de la luz no sólo en los hogares, sino también en las empresas.
También contribuyó a esa espiral alcista el encarecimiento de la gasolina y el gasóleo (16,7 y 15,4 % de media, respectivamente), con impacto por ejemplo en el transporte por carretera.
Los aceites comestibles sin incluir el de oliva (26,9 %), los combustibles líquidos (26,5 %), los hidrocarburos licuados como el butano o el propano (14,9 %), el aceite de oliva (13,6 %) y los refrescos (10,1 %) completan la lista de productos y servicios con aumentos de precio a doble dígito.
En el lado contrario, 7 subclases vieron cómo su IPC se mantenía intacto respecto a 2020 y otras 49 registraron bajadas, aunque mayormente de menor intensidad que las subidas; de hecho, no hubo caídas a doble dígito.
Entre las categorías que más redujeron su precio se situaron los equipos y servicios de telefonía móvil, con un retroceso del 8 y del 4,3 %, respectivamente, así como los ordenadores personales (-5,1 %).
Por las dificultades que atravesó el turismo se explican las bajadas de precio de los vuelos internacionales (-7,5 %) y los nacionales (-4,5 %), así como de los paquetes turísticos internacionales (-5 %) y los hoteles, hostales, pensiones y demás alojamientos (-4,2 %).
También están relacionadas las restricciones de movilidad con que se abarataran el pasado año los automóviles de segunda mano (-4,6 %) y los peajes, aparcamientos públicos y parquímetros (-7,3 %).