Los turistas españoles que viajen a Brasil a partir del próximo 2 de abril deberán disponer de billete confirmado de regreso y de medios económicos suficientes para la manutención y alojamiento durante el tiempo que dure su estancia en el país sudamericano.
El Gobierno de Brasil ha adoptado estas medidas más rígidas en reciprocidad con los requisitos que España exige a los ciudadanos de este país en aplicación de las normas establecidas por la UE para acceder a los países del espacio Schengen, zona sin fronteras interiores que permite la libertad de movimientos.
Además del pasaporte, con una validez de al menos seis meses, las autoridades brasileñas de control migratorio exigirán a partir del 2 de abril el billete de avión de ida y también el de vuelta, con fecha confirmada.
También un comprobante de medios económicos suficientes para manutención por un valor mínimo de 170 reales (unos 80 euros) al día.
Para comprobar esta solvencia, será preciso presentar la tarjeta de crédito y su última factura para que se pueda verificar el límite.
En caso de alojamiento en un hotel, será preciso el documento de reserva pagada.
Si se trata de una casa particular, se demandará una carta de invitación de un residente en la ciudad brasileña de destino, informando del plazo de estancia del turista español.
La carta deberá estar compulsada ante un notario brasileño y acompañada de un comprobante de residencia emitido a nombre del declarante.
Como ya ocurría antes, no será necesario visado, salvo para estancias superiores a 90 días o por motivos distintos del turismo.
Las nuevas medidas han sido notificadas a los consulados brasileños en España y a las autoridades españolas.
El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación ha actualizado su página web para informar de los nuevos requisitos de viaje a Brasil, uno de los principales destinos de los turistas españoles que van a Sudamérica.
La mayor rigidez en el cumplimiento de los requisitos de entrada se aplicará solo a turistas españoles y no a ciudadanos de países del espacio Schengen.
Un portavoz de la División de Inmigración del Ministerio de Exteriores de Brasilia justificó esta medida en el rigor con que la policía española aplica las normas de entrada en el aeropuerto de Barajas.
En el primer trimestre de 2008 el rechazo de viajeros brasileños en España provocó el malestar y la protesta de las autoridades del país sudamericano.
Para solucionar esta crisis, ambos Gobiernos acordaron desarrollar distintas fórmulas de cooperación policial para mejorar la situación de los no admitidos en los aeropuertos y resolver con agilidad los incidentes que pudieran surgir en ambas fronteras.
Esta colaboración permitió que las cifras de inadmitidos descendieran en un primer momento.
El Ministerio de Exteriores español ha informado de que el canal de interlocución que se abrió en 2008 con las autoridades brasileñas sigue abierto con el fin de "reforzar la cooperación y evitar malentendidos", han señalado a Efe fuentes de este departamento.
Exteriores subraya que existe una "excelente" relación bilateral y que Brasil es un socio prioritario para España.
Brasil organizará importantes eventos en los próximos años, como la Jornada Mundial de la Juventud (2013), el Mundial de Fútbol (2014) y los Juegos Olímpicos de 2016.