El primer ministro británico, David Cameron, defendió hoy la necesidad de bombardear al Estado Islámico (EI) en Siria por razones de "seguridad nacional", al abrir el debate parlamentario sobre si se aprobarán los ataques aéreos contra el grupo terrorista.
En una abarrotada Cámara de los Comunes, Cameron reconoció la "complejidad" de la situación en Siria, pero insistió en que el Reino Unido afronta una amenaza a su seguridad nacional por el avance de la organización islámica.
Los diputados debatirán durante diez horas si dan luz verde a los ataques aéreos contra el EI en Siria, tras lo cual habrá una votación -prevista para las 22.00 GMT-.
Cameron, que presentó ayer en la Cámara Baja la moción sobre los bombardeos, pidió el apoyo de los diputados a su estrategia para combatir la amenaza terrorista y consideró que al Reino Unido no le queda otra opción que sumarse a la lucha contra el EI
"El asunto que se presenta en la cámara hoy es cómo mantenemos al pueblo británico seguro ante la amenaza que supone el EI. No se trata de si queremos luchar contra el terrorismo, sino que se trata de ver cómo lo hacemos", afirmó el político conservador, quien recordó que las fuerzas de seguridad han frustrado siete atentados contra el Reino Unido en el último año.
En su intervención, el primer ministro recordó los atentados de París, así como el perpetrado por el EI en Túnez el pasado junio, en el que más de veinte turistas británicos perdieron la vida.
Al argumentar la necesidad de bombardear en Siria, Cameron reiteró que su plan forma parte de un amplio programa militar, estratégico, diplomático y humanitario en Siria.
"No voy a fingir que las respuestas sean simples. La situación en Siria es de una increíble complejidad (...) ni tampoco estoy ignorando los riesgos de una acción militar", admitió.
Según Cameron, la solución final en Siria debe ser el establecimiento de un Gobierno que represente a toda la población y que "pueda trabajar con nosotros para derrotar a una perversa organización como es el EI".
Un total de 157 diputados se han registrado para tener la palabra durante el debate de hoy, en el que cada parlamentario no podrá extender sus argumentos durante más unos cinco minutos.
Cameron había indicado que sólo pediría la votación sobre los bombardeos en Siria si estaba seguro de ganarla.
Se espera que el "premier" obtenga un sólido resultado en la votación, que permitirá al Reino Unido ampliar a Siria los ataques aéreos contra el EI que actualmente lleva a cabo en Irak.
La prevista intervención británica en Siria ha causado divisiones entre los laboristas, después de que su líder, Jeremy Corbyn, manifestase su oposición a los ataques, en contra de la opinión expresada por varios miembros de la cúpula de la formación.
Corbyn decidió conceder a sus diputados libertad de voto en vez de aplicarles la disciplina del partido, que les hubiera forzado a posicionarse esta noche en contra de los ataques.
Se espera que, una vez aprobados esta noche los bombardeos, los aviones de la Real Fuerza Aérea (RAF) británica empiecen a atacar posiciones del EI en Siria, particularmente en la ciudad de Al Raqa, en los próximos días.
A finales de 2014, la Cámara de los Comunes autorizó bombardeos contra posiciones del EI en Irak pero no en Siria.
Cameron sostiene que la serie de atentados perpetrados el pasado 13 de noviembre en París, en los que 130 personas murieron, hace necesario acelerar la decisión del Reino Unido sobre este asunto.