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Las autoridades chilenas dieron inicio en la tarde del domingo a su 'plan B' para rescatar a los 33 mineros que se encuentran atrapados desde hace un mes en la mina San José, en el norte del país.

Pasadas las 16.00 (22.00 en la España peninsular) la máquina excavadora T-130 comenzó sus operaciones, dirigidas a cavar una galería paralela a la que se comenzó a trazar el pasado lunes y con la que se pretende llegar al lugar donde se encuentran refugiados los mineros, a más de 630 metros de profundidad, informó la cadena CNN Chile.

"Es un momento de esperanza de que logremos en el menor tiempo posible traerlos a la superficie, devolverlos a sus familias y poder terminar esta operación de rescate", señaló ante la prensa el ministro de Minería chileno, Laurence Golborne.

El responsable de Minería acudió al yacimiento para acompañar a los familiares y amigos de los mineros atrapados, a quienes les informó sobre los avances de las tareas de rescate, que podrían prolongarse hasta principios de noviembre.

La máquina del 'plan A', la 'Strata-950', ha conseguido cavar ya 67 metros de profundidad. Sus operaciones se vieron interrumpidas durante varias horas el pasado jueves después de que se detectaran fallas geológicas en las paredes del yacimiento.

A las dos máquinas perforadoras que ya están en la mina San José, se confirmó que se sumará un tercer equipo, una máquina de perforación petrolera perteneciente a la Empresa Nacional de Petróleo

Emoción tras primera videoconferencia con los 33 mineros

Los 33 mineros atrapados y sus allegados mantuvieron este sábado la primera videoconferencia en tiempo real desde el pasado 5 de agosto, cuando quedaron encerrados, lo que provocó mucha emoción en el campamento "Esperanza".

Fue alrededor de un minuto de conversación entre cada minero y algunos de sus familiares. Gracias a un sistema de comunicación de fibra óptica, las familias pudieron ver y oír a los trabajadores, mientras que en las entrañas de la mina ellos solo pudieron escuchar las palabras que les llegaron del exterior.

Jéssica Salgado, esposa del minero Alex Vega, de 31 años, no ocultó su emoción tras el breve encuentro: "lo vi de muy buen semblante, afeitadito, no como la vez pasada"."Le dije que lo amaba mucho y lo único que él dijo es que estaba preocupado por nuestras deudas acá afuera, aunque ya le dije que no se preocupe", indicó.

Jéssica acudió a la pequeña cabina donde se realizó la videoconferencia acompañada de una de sus tres hijas, de tan solo seis años. "La pequeña habló con su papá y le dijo que lo quería mucho", añadió la mujer.