La chimenea por la que saldrá la "fumata blanca" que anunciará al mundo que la Iglesia Católica tiene nuevo papa, fue colocada hoy en la Capilla Sixtina, lugar donde se desarrollará el cónclave del que saldrá el sucesor de Benedicto XVI.
La chimenea, de casi dos metros de alta, fue colocada por personal técnico del Vaticano, que la unieron al tubo de cobre al que han sido conectadas las dos estufas que se usarán durante el cónclave, una para quemar las papeletas de las votaciones y otra una estufa auxiliar que permitirá, gracias a un mecanismo electrónico, incrementar la visibilidad de la fumata.
Las dos estufas han sido colocadas en un lateral, trasero, de la capilla Sixtina, donde prosiguen las obras de acondicionamiento para acoger a partir del día 12 de marzo el segundo cónclave del tercer milenio.
De momento se desconoce si se harán pruebas de "fumatas", para ver si funciona bien o no, pero son numerosos los fotógrafos y turistas los que no quitan ojo a la chimenea, que se ve perfectamente desde la plaza de San Pedro.