Las fuerzas de seguridad de Estados Unidos no tienen pruebas de ningún plan de ataque terrorista en el aniversario del asesinato del líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, pero se mantienen vigilantes, dijo hoy el jefe de antiterrorismo de la Casa Blanca, John Brennan. "No vamos a bajar la guardia", afirmó Brennan durante una entrevista en el programa "News Sunday", de la cadena Fox de televisión.
"A lo largo de la última década hemos degradado Al Qaeda, la organización central y mantenemos nuestra determinación de destruirla en Pakistán, en Afganistán, en Yemen", añadió el funcionario.
Brennan dijo que el grupo Al Qaeda en la península arábiga "ha demostrado su capacidad para amenazar a Estados Unidos y continuaremos manteniendo nuestro enfoque en degradar ese grupo hasta que sea destruido".
El presidente Barack Obama recientemente autorizó a la Agencia Central de Inteligencia a utilizar con mayor flexibilidad los aviones no tripulados en la vigilancia de las operaciones de grupos terroristas en Yemen, así como para ataques con objetivos identificados. Esos aviones robóticos -"drones" en inglés- "son herramientas con capacidades tremendas contra los terroristas", dijo Brennan. "Nos permiten vigilar las actividades, proporcionan a los analistas de inteligencia información sobre esas actividades, y nos permiten llevar a cabo ataques".
La decisión de llevar a cabo los ataques, añadió, "se hace siempre en consulta con nuestros aliados".
Según Brennan, los grupos extremistas que operan en Yemen "están resueltos a matar estadounidenses "y el Presidente ha dicho que tomará todas las medidas necesarias para evitar esos ataques".
Brennan recordó la jornada, hace un año, cuando el Gobierno de Estados Unidos tuvo información sobre la localización de Bin Laden y el presidente Obama aprobó la incursión de un pelotón de fuerzas especiales de la Marina que culminó con la muerte de Bin Laden.
"Es un día que pervivirá en la memoria de todos nosotros por el resto de nuestras vidas", dijo Brennan. "En esos momentos, estábamos todos, más que nada, enfocados en la misión, en la protección y seguridad de nuestros soldados".
"Pero también en la memoria estaban todas las víctimas causadas por Al Qaeda en los ataques del 11 de septiembre (de 2001)", añadió. "Fue una misión que se había demorado demasiado y estoy satisfecho porque aprovechamos la oportunidad".