Familiares de encarcelados en Venezuela se reunieron en una vigilia en Madrid para pedir por la liberación de los "presos políticos", detenidos en su mayoría durante las protestas posteriores a las elecciones presidenciales de julio, en "estas fechas tan sentimentales".
"Es muy probable que no cesen estas detenciones, por lo cual debemos elevar la voz y exigir la liberación de todos ellos", afirmó Verónica Noya, representante de los familiares congregados a las puertas de una iglesia del centro de Madrid.
La ONG Foro Penal informó de que en Venezuela hay 1.849 "presos políticos", la mayoría detenidos en el contexto de las protestas postelectorales contra el resultado oficial que dio la reelección al actual presidente, Nicolás Maduro.
Tanto el hermano como el marido de Noya se encuentran presos en Venezuela desde hace cinco años y, según denunció en declaraciones a Efe, desde hace tres semanas están "totalmente aislados".
"Tenemos tres semanas exigiendo fe de vida de ellos y de 20 presos políticos más que se encuentran en el centro de torturas de El Rodeo en Venezuela en condiciones inhumanas", explicó.
Venezolanos en Madrid convocó esta vigilia tras la detención el pasado 24 de diciembre de Luis Tarbay, coordinador de los equipos internacionales del comando de campaña opositor Mundo con Venezuela.
Ese mismo día, la líder opositora venezolana María Corina Machado denunció su "secuestro" por parte del "régimen" de Nicolás Maduro.
"Pido a todos los venezolanos que están alrededor del mundo y aquí en nuestro país que levanten sus voces durísimo por su libertad", manifestó Machado en X.
Noya señaló que la "preocupante" detención de Tarbay demuestra que "pensar distinto y hacer política en Venezuela está prohibido", a la vez que denunció que numerosos dirigentes políticos están en "desaparición forzada" porque sus familiares no saben dónde ni en qué condiciones están, lo que supone una "clara violación de los derechos humanos en Venezuela".
Antes del comienzo de la misa, algunos familiares mostraron imágenes de los presos de los que exigieron fe de vida.
Ya durante la vigilia, compartieron testimonios sobre las detenciones de sus seres queridos y aseguraron que algunos se vieron obligados a abandonar Venezuela porque se les usaba para amenazar a sus familiares detenidos.