Las autoridades de Hungría interceptaron ayer a 2.770 refugiados que cruzaron ilegalmente la frontera sur con Serbia, con lo que el número de inmigrantes que llegaron al país en lo que va del año alcanza ya los 170.000, informó la policía. Mientras, en la estación de trenes de Keleti en Budapest continuaba la rutina de los días anteriores, con cientos de refugiados que intentan acceder a los trenes que van directos a Austria o Alemania, según el portal "index".
Aun así, la situación en Keleti parece haberse estabilizado, ya que la gran mayoría de refugiados que acceden a ella, procedente de otros puntos del país, logran seguir su viaje en poco tiempo hacia la frontera austríaca.
En el punto de reunión de la localidad de Röszke, cerca de la frontera con Serbia, continúa la tensión, ya que muchos refugiados se ven obligados a pasar allí la noche, esperando que sean trasladados a alguno de los centros de registro cercanos. Centenares de refugiados intentaron ayer huir del lugar pero fueron capturados pocas horas más tarde por la policía.
Los inmigrantes se quejan de las largas esperas y las malas condiciones en el primer centro de acogida. Además, tratan no ser registrados (identificados) por las autoridades en Hungría, para poder presentar sus solicitudes de asilo en Alemania o en otro país del norte de Europa sin correr el riesgo de ser devueltos.
Esta mañana siguieron llegando cientos de refugiados que cruzan la frontera siguiendo la vías férreas, donde hay un "agujero" en la valla alambrada, para que los trenes puedan pasar, informó hoy la televisión pública M1.
Mientras, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) anunció que para aliviar la situación en el punto de reunión de Röszke, la ONU aportará decenas de carpas, para mejorar las condiciones cuando por la noches las temperaturas bajan hasta entre los 10 y 15 grados centígrados.
La ACNUR instó ayer a Hungría a mejorar las condiciones de recepción para los solicitantes de asilo que llegan al país y hacer que los procesos de registro de los refugiados sean más sencillos.
UNOS 6.000 REFUGIADOS PASARON POR AUSTRIA DESDE EL MARTES POR LA MAÑANA
Paralelamente, unos 6.000 refugiados de Oriente Medio pasaron desde ayer por la mañana por Austria en su viaje desde Hungría a Alemania, informó hoy la radio pública austríaca ORF. "Sabemos que la situación es muy dinámica. En los próximos días esperamos varios miles de personas por día, que viajarán a través de Viena hasta Alemania", señaló el portavoz de la policía austríaca, Patrick Maierhofer.
Solo desde la medianoche de hoy entraron casi 900 refugiados a la república alpina, agregó el portavoz a la emisora. Centenares de refugiados pasaron la pasada noche en la estación oeste de Viena (Westbahnhof), donde la empresa federal ferroviaria ÖBB ha instalado salas para dormir y descansar.
Un portavoz de ÖBB indicó hoy que la empresa estatal austríaca tiene un centenar de empleados adicionales en Viena dedicados solo a la gestión deltraslado de los refugiados hacia Alemania. "Vivimos una situación de emergencia desde hace dos semanas", recordó un portavoz en declaraciones a ORF.
Ante la crisis migratoria en Hungría, a donde llegan cada día miles de refugiados que cruzan la frontera con Serbia, los Gobiernos de Berlín y Viena accedieron la semana pasada a darles vía libre. En un primer momento, los refugiados fueron trasladados a la frontera austro-húngara en autobuses, después se acercaron en trenes regionales húngaros a la frontera, que pasaron andando, para ahora llegar directamente en trenes internacionales a Viena o Múnich.
De esta forma, llegaron desde el pasado sábado hasta hoy unos estimados 29.000 refugiados de Oriente Medio a Alemania. En su camino por Austria apenas varias decenas han pedido asilo político en la república alpina, el resto ha seguido rumbo al país vecino.
