(Actualizado

El ministro de Petróleo de Irán, Rostan Qasemi, advirtió a los países de la Unión Europea que Irán les cortará el suministro de crudo si no firman contratos a largo plazo y con el pago garantizado, informó la agencia local Fars. Según la fuente, Qasemi instó a los países europeos importadores de petróleo iraní, entre ellos España, a adoptar con rapidez una decisión sobre esos contratos, a riesgo de verse como Francia y el Reino Unido, a los que Teherán considera principales promotores de las sanciones contra Irán y cortó el suministro el pasado domingo.

"Hemos adoptado la decisión en nuestro propio país y sancionado a los estados hostiles (Francia y Reino Unido), Si otro países europeos no ponen de manifiesto la decisión de firmar contratos a largo plazo con Irán, Teherán tomará la misma decisión con ellos", recalcó Qasemi. Las medidas reclamadas por Qasemi, que según dijeron a Efe varias fuentes diplomáticas europeas, supondrían la firma de contratos de compra de crudo de entre dos y cinco años, con garantía de transferencia del pago, son incompatibles con las últimas sanciones aprobadas por la Unión Europea a Irán.

El pasado 23 de enero, la UE aprobó una prohibición de compra de petróleo a Irán a partir del próximo 1 de julio y nuevas sanciones financieras que prácticamente imposibilitarán las transferencias bancarias de los Veintisiete a Irán y viceversa, si no suspende su programa nuclear, que creen que tiene fines militares.

Ahora, según Qasemi, Teherán toma la iniciativa y puede dejar sin suministro a un grupo de países que podrían tener dificultades para encontrar otros proveedores en un breve plazo, antes del 1 de julio, y tener que realizar gastos extraordinarios para adaptar sus refinerías a un tipo distinto de crudo.

Además, indicó que, tras un eventual corte de las ventas a los países europeos, que suponían alrededor de un 18 por ciento de los 3,6 millones de barriles de crudo que exporta Irán al día, "no habría problemas para vender el petróleo iraní en los mercados internacionales, pues tenemos buenos clientes y amigos".

El miércoles pasado, el Ministerio de Exteriores iraní convocó a los embajadores de España, Italia, Francia, Grecia, Holanda y Portugal para comunicarles las nuevas condiciones de la venta de crudo, en unas reuniones que los medios locales interpretaron como la advertencia de un eventual corte de suministro. De estos países, los más afectados serían Italia, España y grecia, que adquieren entre un 13 y un 14 por ciento del petróleo que consumen de Irán.

El último domingo, el Ministerio de Petróleo iraní anunció la suspensión de las ventas de crudo a Francia y Reino Unido, cuyos gobernantes han mostrado actitudes más hostiles hacia el Gobierno de Irán, lo que ya disparó los precios internacionales del petróleo, que previamente ya habían tenido una subida progresiva.

La advertencia iraní coincide con la presencia de un equipo de alto rango del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) para tratar cuestiones pendientes del programa nuclear iraní y la sospecha de que puede tener una vertiente nuclear, lo que Teherán niega, al tiempo que afirma que es exclusivamente civil y pacífico.

Tanto la ONU como EEUU y la UE han impuesto sanciones a Irán para que suspenda su programa nuclear, pero Teherán ha señalado que no abandonara su programa, que asegura que tiene como objetivos la producción de energía y su uso en sectores civiles, como la medicina.