Dólares | Europa Press
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La elevada inflación ha obligado a la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) a tomar una importante decisión: ha decidido elevar los tipos de interés del país en 50 puntos básicos, hasta situarlos en un rango objetivo de entre el 0,75% y 1%.

El precio del dinero sube

Se trata del mayor alza del precio del dinero desde el año 2000, hace 22 años. Desde entonces las subidas de tipos siempre se habían limitado a ser en tramos de 25 puntos básicos.

Asimismo, la autoridad monetaria ha acordado empezar a reducir el tamaño de su balance a partir del mes de junio, a razón de 37.500 millones de dólares por mes durante un periodo inicial de tres meses. Tras ese tiempo, el volumen de reducciones se elevará.

El presidente de la institución, Jerome Powell, indicó además que "incrementos adicionales de 50 puntos básicos deberían estar sobre la mesa" en las próximas reuniones del organismo.

El máximo responsable del banco central apuntó, en una rueda de prensa posterior a la reunión de dos días de la Junta de Gobernadores del sistema de la Reserva Federal, que sin embargo, por el momento, no están contemplando subidas de 0,75 o de un punto entero.

Si, tal y como indicó Powell, a este anuncio suceden otros aumentos de 0,5 puntos en los próximos meses, sería factible que la mayor economía del mundo cerrase 2022 con un tipo de interés cercano al 3 %.

El presidente de la Fed confía que este cambio hacia políticas monetarias restrictivas no suponga un golpe excesivo para la actividad económica del país, y apuntó como argumentos para defender ese pronóstico a la gran fortaleza del mercado laboral y a la buena situación financiera de los hogares y empresas.

Tanto hogares como empresas tienen todavía suficientes ahorros y un nivel de endeudamiento relativamente bajo que les concede un buen colchón para hacer frente a cualquier posible impacto, según Powell.

En cuanto al mercado laboral, reiteró en varias ocasiones que en la actualidad hay prácticamente dos ofertas de empleo por cada persona que busca trabajo, lo que calificó de "desequilibrio" entre la oferta y la demanda.

En junio, julio y agosto, la Fed se desprenderá de 30.000 millones de dólares en letras del Tesoro y de 17.500 millones en valores respaldados por hipotecas cada mes

Aunque un mercado laboral fuerte es en general una buena noticia, la "demanda excesiva" de trabajadores también tiene efectos negativos, puesto que lleva a las empresas a competir entre ellas por los empleados y dispara los sueldos, lo que a su vez contribuye a hacer subir aún más la inflación.

En este sentido, Powell espera que haya dos factores que mitiguen la escasez de trabajadores: por un lado, el regreso a la fuerza laboral de personas que se habían retirado de ella temporalmente por la pandemia; y, por otro, el ralentizamiento del ritmo de creación de puestos de trabajo, actualmente en máximos históricos.La Fed también anunció hoy que a partir del 1 de junio empezará a reducir su cartera de deuda pública del Gobierno de EE.UU., compuesta fundamentalmente de letras del Tesoro y de valores respaldados por préstamos hipotecarios.

El principal objetivo del banco central estadounidense en estos momentos es mitigar la elevada tasa de inflación, que en marzo pasado se situó en el 8,5 %, la más alta registrada desde 1981.