Netanyahu mantiene una llamada telefónica con Biden tras el ataque iraní | EFE
(Actualizado

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo este domingo que su país está "negociando, no cediendo" ante Hamás, mientras dialoga sobre un posible cese el fuego con los países mediadores, a los que instó a ejercer presión sobre el grupo islamista y no sobre Israel.

"Estamos negociando, no cediendo. Hay cosas sobre las que podemos ser flexibles y hay cosas sobre las que no, e insistimos en ellas. Sabemos muy bien diferenciar entre ambas", dijo Netanyahu, según un comunicado de su oficina.

"Estamos negociando la liberación de nuestros rehenes. Ésta es ante todo una tarea moral y nacional. Estamos llevando a cabo negociaciones muy complejas cuando del otro lado está una organización terrorista asesina, desinhibida y recalcitrante", añadió, al comienzo de una reunión con su Gabinete.

EEUU cree que la semana próxima podría llegarse a un acuerdo para un alto al fuego en Gaza

Estas declaraciones llegan el mismo día en que tiene previsto llegar a Israel el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, para impulsar el acuerdo de cese el fuego que promueve Washingon a través de los otros países mediadores, Catar y Egipto.

Israel envió el jueves pasado un equipo negociador a Doha, que tras reunirse con los negociadores mostró un "optimismo cauteloso".

De su lado, Hamás no acudió a la cita catarí y demandó, en cambio, que se implemente directamente lo ya acordado según la primera propuesta estadounidense de finales de mayo.

"Hamás, hasta el momento, se ha mantenido en su negativa. Ni siquiera envió un representante a las conversaciones de Doha. Por tanto, la presión debería dirigirse a Hamás y (a su líder Yahya) Sinwar, y no al Gobierno israelí", estimó Netanyahu este domingo.

Israel insiste en que los puntos que llevó a la mesa en Doha "se basan en el esquema del 27 de mayo" que propuso el presidente estadounidense, Joe Biden, pero Hamás continúa reivindicando que lo tratado en Doha no cumple con la propuesta original y que da pie a nuevas demandas israelíes con la complicidad estadounidense.

La comunidad internacional apoya ampliamente la firma de un cese el fuego tras más de 10 meses de guerra que han causado más de 40.000 muertos palestinos, 92.000 heridos y 1,9 millones de desplazados en la devastada Franja de Gaza, donde aún se encuentran secuestrados 111 rehenes israelíes, de los cuales al menos 39 habrían muerto.