El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó que Irán cumple con el acuerdo nuclear multilateral que entró en vigor el pasado 16 de enero y que ha permitido que la comunidad internacional levante las sanciones a Teherán.
"Irán no ha enriquecido uranio por encima del 3,67 por ciento", señala un informe confidencial del OIEA, la agencia de la ONU encargada para vigilar y verificar que República Islámica cumpla con todas las exigencia acordadas.
Junto con desmantelar ciertas instalaciones, como el reactor de agua pesada en Arak, el punto central del pacto es mantener la pureza del uranio enriquecido por debajo del 4 por ciento, frente al 90 por ciento que se necesitaría para construir una bomba atómica.
"El OIEA sigue la verificación de que no haya ninguna desviación de material no declarado en las instalaciones nucleares y en aquellas instalaciones donde el material atómico se usa de forma habitual", señala el informe. El acuerdo nuclear prevé limitar varios aspectos del programa nuclear iraní durante períodos de entre 10 y 25 años, a cambio de levantar las sanciones internacionales a Irán.
El OIEA señala también que desde el 16 de enero, tal como estaba previsto, sus inspectores actúan bajo el denominado Protocolo Adicional de Salvaguardas. De esta forma, los inspectores de la agencia nuclear de la ONU pueden realizar visitas e inspecciones sin aviso previo a cualquier instalación nuclear de la República Islámica.
El OIEA es responsable de verificar el cumplimiento por parte de Teherán del acuerdo, que busca garantizar el carácter exclusivamente pacífico de su programa nuclear. El contenido del informe permite continuar con la aplicación del acuerdo y en particular con la normalización de las relaciones económicas entre Irán y la comunidad internacional.
Irán siempre negó que tuviera intenciones militares con su programa nuclear, si bien, a juicio de algunos países y de la OIEA, no ofreció la transparencia necesaria para esclarecer el alcance y la naturaleza de sus actividades atómicas.