El presidente estadounidense, Barack Obama, hizo hoy una clara advertencia a los responsables de los atentados de la maratón de Boston: "Os encontraremos y os enfrentareis a la justicia". En un oficio religioso ecuménico en la catedral católica de la Santa Cruz, el presidente aseguró que, si los terroristas querían atacar los valores de Estados Unidos, "eligieron la ciudad equivocada".
En un discurso muy emotivo, con el templo repleto, el presidente estadounidense recordó los valores de patriotismo y al mismo tiempo apertura al mundo que representa la ciudad de Boston.
Barack Obama, aseguró hoy que tras el atentado del lunes en la maratón de Boston, "estamos aquí para reclamar el espíritu de la ciudad", abierta al mundo y símbolo de los valores del país.
Boston siempre "abre su corazón al mundo... a hombres de todas las razas", como demostró la organización del maratón de la ciudad, que se tornó en tragedia con las dos explosiones del lunes, que causaron 3 muertos y más de 170 heridos. "Boston, no tengo ninguna duda de que volverás a correr, volverás a correr", afirmó Obama, entre los aplausos.
EL FBI BUSCA A VARIOS INDIVIDUOS PARA INTERROGARLOS
El FBI busca, para interrogarlos, a varios individuos vistos en los vídeos grabados por las cámaras de seguridad de los alrededores del maratón de Boston, según dijo hoy la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jannet Napolitano, quien aclaró que todavía no son considerados "sospechosos".
La secretaria, que compareció ante el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes para tratar el presupuesto de 2014, fue preguntada por los avances en la investigación sobre las bombas que explotaron el pasado lunes al final del maratón, que han causado tres muertos y 176 heridos.
El presidente del comité, el representante republicano de Texas Michael McCaul, preguntó sobre las informaciones de que el FBI busca a dos hombres relacionados con las explosiones.
Napolitano señaló que se están recogiendo pruebas de una "gran variedad de fuentes" y señaló, sin especificar, que hay un vídeo en el que aparecen unas personas que han planteado dudas a los investigadores y "con las que el FBI quiere hablar".
"No los describiría como sospechosos según el término técnico, pero necesitamos la ayuda del público para localizar a esos individuos", señaló.
El FBI está considerando si revelar imágenes de los individuos obtenidas de los fotogramas del vídeo, según apuntan varios medios, pero todavía no se ha tomado una decisión.
Napolitano señaló que todavía no está claro si las bombas son obra de un grupo terrorista extranjero o nacional, al tiempo que destacó la cooperación entre los distintos cuerpos de seguridad para que la investigación continúe "a un ritmo acelerado".
Los investigadores del FBI indicaron que han identificado a un sospechoso de colocar una de las dos bombas que estallaron el lunes cerca de la línea de meta de la maratón de Boston, aunque un caótico día repleto de confusión no ha aportado todas las respuestas que los vecinos de la ciudad esperaban.
Una cámara de vigilancia en la tienda Lord&Taylor, justo frente al lugar de la segunda explosión, grabó a una persona cuando depositaba una mochila negra, que supuestamente contenía la olla a presión repleta de explosivos y metralla que detonó poco antes de la tres de la tarde entre el público al paso de los corredores.
17 EN ESTADO CRÍTICO, 100 DADOS DE ALTA
Mientras tanto, los hospitales de Boston ya han dado de alta a cerca de 100 heridos, aunque aún permanecen en estado crítico 17 personas, algunas de ellas niños de corta edad con graves heridas y amputaciones.
Este miércoles, mientras los equipos de investigación, pertrechados con trajes aislantes para no contaminar pruebas, operaban en las cercanías, las personas depositaban mensajes y flores en las vallas que delimitan la escena del crimen. La concienzuda barrida de las calles y edificios colindantes a la línea de meta de la calle Boylston ha dado resultados y los investigadores han encontrado restos de las ollas a presión donde se cree que fueron depositados los explosivos y la metralla.
La olla con una capacidad de 6 litros, de la marca española Fagor, pudo ser activada con un temporizador o a distancia y la puesta en común de todas las piezas que la componían podría aportar datos para reconstruir el atentado. Las bombas fueron depositadas dentro de una mochila negra entre la multitud que abarrotaba la recta final del maratón, que contaba con fuertes medidas de protección, con más de mil agentes y efectivos militares y perros para olfatear explosivos.