La Cámara baja del Parlamento egipcio reanudó hoy sus sesiones, después de que el presidente del país, Mohamed Mursi, ordenara su restablecimiento tras su disolución el mes pasado por la Junta Militar, basándose en un fallo del Tribunal Constitucional que anuló los comicios legislativos. El presidente de la Cámara, el islamista Mohamed Saad Katatni, inauguró la sesión, que solo duró doce minutos, con un discurso en el que explicó que "el decreto del presidente no afecta al fallo del Tribunal Constitucional, sino a la decisión de la Junta Militar de disolver la Asamblea del Pueblo (Cámara baja)".
Katatni apuntó que es la Corte de Casación la que tiene la competencia para decidir sobre este contencioso y decidió trasladar el caso ante ese tribunal, que tiene un largo historial de sentencias contradictorias con el Constitucional.
Mursi ordenó restaurar la Cámara baja, con mayoría islamista y disuelta por la Junta Militar el mes pasado tras el fallo del Constitucional.
Una tercera parte de los diputados elegidos (166) en los comicios de diciembre y enero pasado consiguieron su escaño en listas individuales abiertas, pero el Constitucional consideró que vulneraron la ley, ya que concurrieron representando a partidos políticos y no de forma independiente.
Durante su alocución, Katatni hizo un repaso por la cronología de los hechos ocurridos desde el pasado 15 de junio cuando la Junta Militar emitió un decreto para la disolución de la Cámara baja, un día después de la sentencia del Constitucional. Subrayó que la Asamblea del Pueblo conoce sus competencias y a sus responsables y no interviene en los asuntos de la justicia ni comenta sus fallos, ya que la ley tiene sus propios mecanismos que rigen la apelación de las sentencias.
Tras su discurso, Katatni decidió aplazar la sesión, sin fijar fecha.
La reunión se celebró pese al boicot de los principales grupos liberales y laicos como el Bloque Egipcio y el Wafd, que rechazan el decreto promulgado por el presidente hace dos días.
En declaraciones a Efe, la portavoz del Partido Socialdemócrata Hala Mustafa, cuyo grupo pertenece al Bloque Egipcio, afirmó que ningún parlamentario de esta coalición participó en la reunión de hoy.
Mientras que una parte de los diputados del Bloque Egipcio ha decidido boicotear definitivamente el Parlamento actual, otros esperan que el Tribunal Supremo Administrativo emita una sentencia sobre la decisión de Mursi de restaurar la Cámara baja, dijo Mustafa.
Actualmente, hay diecisiete denuncias contra el decreto presidencial en la corte administrativa, que estudia varios casos controvertidos como el de las enmiendas constitucionales aprobadas por la Junta Militar para reservarse prerrogativas y el de la propia disolución del Parlamento.
Por su parte, el miembro del Comité Ejecutivo del partido Al Wafd Yaser Hasan dijo a Efe que sus parlamentarios tampoco tomaron parte en la sesión porque su grupo "rechaza la decisión de Mursi de restablecer la Asamblea del Pueblo". "El Parlamento actual es inválido", zanjó Hasan.