El presidente ruso, Vladímir Putin, ha admitido este miércoles, que las acciones militares en Ucrania podrían alargarse en el tiempo, pero descartó una segunda ola de movilización de reservistas.
"Por supuesto, esto puede ser un proceso prolongado", afirmó hoy durante la reunión del consejo de derechos humanos adscrito al Kremlin.
Al mismo tiempo, Putin subrayó que sería un error no reconocer que en Rusia "han aparecido nuevos territorios", en alusión a las cuatro regiones ucranianas anexionadas en septiembre (Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia).
"Es un resultado significativo para Rusia. Y el mar de Azov se ha convertido en un mar interior de Rusia. Son cosas serias. Pedro el Grande ya luchó por encontrar una salida al Azov", dijo.
Recordó que los referendos celebrados en esos cuatro territorios demostraron, según el jefe del Kremlin, que sus habitantes quieren vivir con Rusia.
"Y ese es el resultado más importante. Ahora, ellos están con nosotros. Y son millones de personas. Eso es lo principal", subrayó.
Putin utilizó la palabra "guerra" para asegurar que no fue Rusia la que inició los combates en el Donbás en 2014, cuando estalló la sublevación prorrusa contra Kiev.
A su vez, descartó una segunda ola de movilización de reservistas con el objetivo de reforzar a las tropas que ya combaten Ucrania.
"Esos rumores (...) no tienen sentido. A día de hoy, no hay ninguna necesidad de ello ni para el Estado ni para el Ministerio de Defensa", dijo.
El líder ruso explicó que la mitad de los reservistas, 150.000, se han sumado al contingente desplegado en Ucrania, de los que sólo 77.000 forman parte de unidades de combate.
"La mitad de todos los movilizados se encuentran aún en polígonos militares o centros de entrenamiento del Ministerio de Defensa (...), son lo conocido como reserva militar", precisó.
La oposición rusa se ha dirigido a Putin para que firme un decreto que ponga fin, de una vez por todas, a la movilización parcial, informó a EFE Emilia Slabunova, diputada del partido liberal Yábloko, ya que algunos los activistas han denunciado que en algunas regiones continúa el alistamiento.
Putin también negó hoy la deserción masiva en las filas del ejército ruso en Ucrania, la existencia de cárceles para desertores o casos de fusilamiento de hombres que se niegan a combatir