Los Trump viven sus primeras Navidades en la Casa Blanca. El 65 % de los americanos considera que ha logrado "poco o nada".
Los contornos de la doctrina de Trump fueron tomando forma a lo largo del año y dieron contenido al lema "Estados Unidos primero", que Trump había enarbolado durante su campaña electoral.
Lo cierto es que no ha acabado con el "Obamacare", ni ha logradp prohibir la entrada a extranjeros de países musulmanes. Tampoco expulsar a los transexuales del Ejército. Son sus promesas incumplidas.
El punto positivo se lo da la economía, con la menor tasa de paro en 17 años y un Wall Street en buena forma.
Trump tiene aún tres años por delante.
Donald Trump, agitó el mundo en 2017 con una política exterior desconcertante, caracterizada por una aparente desconfianza ante los foros y acuerdos multilaterales y una retórica belicosa hacia un puñado de países, como Corea del Norte, Irán, Venezuela y Cuba. Trump rompió en sus primeros once meses en el poder los esquemas tradicionales de la política exterior estadounidense y los reemplazó por una mezcla de nacionalismo y militarismo que desorientó a los aliados de EEUU y envalentonó a sus rivales.
Acabando 2017, daba un golpe internacional inesperado: reconocía a Jerusalén como capital de Israel.
Pese a todo las sombras de la injerencia rusa en las elecciones siguen creando debate.
Aún con sus problemas, a Trump la Tierra debe parecerle pequeña. Ha decidido que su América vuelva a la Luna. Quizás su próxima cuenta atrás sea para el lanzamiento de una nave espacial.