Los venezolanos han iniciado la jornada electoral con menor entusiasmo que en los comicios de octubre de 2012, ganados por el fallecido Hugo Chávez, según informan medios locales.
En un recorrido por distintos colegios de la capital venezolana, Efe pudo apreciar colas menos largas y menor concurrencia que hace seis meses en los centros de votación durante las primeras horas de la jornada electoral.
El diario El Nacional informó a través de su página web de que los "votantes se movilizan a un ritmo menor que el registrado el 7-O", al igual que el diario El Universal, que reflejaba en su sitio digital una baja asistencia en la zona este de Caracas, tradicional bastión de la oposición.
Últimas Noticias también informa de menos votantes en Guarenas y en el estado Vargas, al norte de Caracas, que en los comicios pasados.
Hasta el momento el Consejo Nacional Electoral (CNE) no ha ofrecido ninguna información oficial de participación.
Sí lo hizo el jefe del plan militar de apoyo electoral, general Wilmer Barrientos, quien aseguró que en las primeras horas de la jornada electoral había "normalidad" y una "masiva concurrencia" de electores.
"No hay colas en los centros de votación, las colas son muy bajas", señaló, por su parte, Carlos Ocaríz, director nacional del equipo de campaña del líder opositor, Henrique Capriles, quien pidió a la población que acuda a votar "lo antes posible".
Las elecciones de octubre registraron una participación récord de 80,48 % de los 18,8 millones de personas habilitados para votar, el mismo padrón que se emplea en los comicios de hoy.
Los analistas han dado por seguro una participación inferior a la registrada en octubre, cuando Chávez se impuso con el 55 % de los votos al líder opositor Henrique Capriles (44,3 %).
Capriles y el candidato chavista, Nicolás Maduro, además de otros cinco representantes aspiran a asumir la Presidencia y terminar en 2019 el mandato que Chávez, fallecido el pasado 5 de marzo, comenzó el 10 de enero.
PRESIDENTE HASTA 2019
El ganador de las elecciones gobernará hasta el 2019 y tomará juramento el 19 de abril, jornada en la que se conmemora el inicio del proceso de independencia del país.
Estos comicios, los primeros desde 1999 sin Chávez como candidato, han estado precedidos por denuncias del Gobierno sobre planes para desestabilizar e incluso de asesinar a Maduro, que la oposición ha atribuido a un intento de "distracción" del Gobierno.
Maduro insistió ayer en esas denuncias en una reunión con representantes extranjeros, entre los que figuraban expresidentes como el dominicano Leonel Fernández, el panameño Martín Torrijos o el guatemalteco Álvaro Colom, así como figuras políticas como el exgobernador estadounidense Bill Richardson.
El candidato chavista aseguró que "están jugando con la credibilidad de un sector de la población" al que "están llenando de odio" para que el domingo o el lunes salga "a quemar las calles" buscando "la violencia para que haya muertos".
Posteriormente, el presidente encargado afirmó que en caso de ser elegido será "un presidente del amor, de la unión, de la verdad, de Cristo" y agregó que si pierde hará una "oposición de amor".
ZOZOBRA
Carpriles respondió a última hora del sábado lamentando que se trate de generar zozobra antes de las elecciones.
"Lamentablemente algunas personas en estas horas, lejos de darle tranquilidad a los venezolanos, lo que tratan es de generar zozobra", indicó.
Afirmó que "ha habido declaraciones muy irresponsables de parte de voceros del Gobierno, irresponsables porque parecen montajes para tratar de generar un clima en el país que nadie desea".
Su equipo de campaña insistió, entretanto, en sus críticas al ente electoral por la utilización del canal del Estado para transmitir mensajes partidistas a favor de Maduro, y la cobertura de una visita del exfutbolista argentino Diego Maradona, quien expresó públicamente su apoyo a la candidatura del aspirante chavista.
Más de 170 observadores internacionales vigilarán el desarrollo de las elecciones.