(Actualizado

Con problemas de conectividad y un amplio operativo de vigilancia policial y militar, Venezuela ha vivido este viernes el apagón más largo desde marzo de 2019 -cuando la nación petrolera pasó varios días a oscuras-, tras sufrir un fallo eléctrico que alteró la cotidianidad del país, en un momento en que atraviesa una crisis política.

Luego de medio día sin luz, el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV) aseguró que las autoridades continuaban restableciendo paulatinamente el servicio, si bien algunos internautas reportan fluctuaciones en varias zonas, así como nuevos cortes en comunidades a las que se les había restituido el suministro.

Un país desconectado

Según información oficial, el fallo se registró a las 4.50 hora local (8.50 GMT) debido a un "sabotaje" que dejó sin luz a Caracas y los 23 estados del país, algunos de los cuales sufren cortes o fluctuaciones del servicio casi a diario.

Admiten un incumplimiento de las normas durante las elecciones de Venezuela

La conexión a Internet cayó hasta el 20% en todo el país, lo que significa que 8 de cada 10 venezolanos se quedaron, al menos durante unas horas, sin poder acceder a redes sociales, medios digitales de pago y canales de comunicación electrónicos.

El apagón, además, limitó -en algunos casos por completo- la señal telefónica, y dejó fuera de servicio el transporte subterráneo así como miles de semáforos.

Acusaciones contra la oposición

Desde las primeras declaraciones, las autoridades señalaron a la líder opositora María Corina Machado y el abanderado del mayor bloque antichavista, Edmundo González Urrutia, como presuntos responsables de este "ataque criminal", sin mostrar pruebas.

María Corina Machado pide que España lidere el reconocimiento de González Urrutia como presidente de Venezuela

Los ministros de Comunicación e Interior, Freddy Ñáñez y Diosdado Cabello, respectivamente, denunciaron que el apagón forma parte de un "plan golpista" por el que acusan a los líderes opositores, al tiempo que advirtieron que "habrá justicia" por este caso.

"Anonymous"

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo que "una cuenta llamada Anonymous" de "la extrema derecha" ya había amenazado con un apagón nacional.

"Una cuenta llamada Anonymous ya sabemos quién la operó, quién la contrató, quién financió. No digo más. Una cuenta Anonymous al servicio de la guerra del odio contra Venezuela amenazó en varias oportunidades con un apagón nacional", aseguró Maduro durante una transmisión del canal estatal VTV.

Brasil no reconoce la victoria de Maduro pese a la decisión del Supremo venezolano

El presidente aseguró que, detrás de este ataque, hay "una sala de guerra de los fascistas" que está -afirmó- en Estados Unidos.

Agresiones a periodistas y medios

El apagón que ha sufrido Venezuela se ha producido en medio de la profunda crisis política y social que atraviesa el país tras las elecciones presidenciales del 28 de julio.

Un total de 102 "agresiones" a periodistas y medios se registraron en Venezuela tras las elecciones, entre ellas "deportación de corresponsales extranjeros" y "detenciones arbitrarias", según un balance publicado por el Colegio Nacional de Periodistas (CNE) seccional Caracas.

María Corina Machado denuncia "prácticas de terrorismo de Estado"

A través de la red social Instagram, la gremial indicó que, desde el día de los comicios hasta este jueves 29 de agosto, hubo 19 casos de "intimidación", 15 de "deportación de corresponsales extranjeros", 15 "detenciones arbitrarias", 14 "impedimentos de cobertura", 10 hechos de "hostigamiento" y 9 "amenazas".

Además se documentaron cinco "agresiones físicas", tres "cierres de programas de radio", tres "campañas en contra de directivos del CNP", dos "borrado de material grabado", dos "daños a sedes de medios de comunicación", un "intento de robo de equipos", una "anulación de pasaporte", un "cierre de emisora de radio", un "robo de equipos" y un "daño de bienes de propiedad de periodista".

El secretario general del CNP Caracas, Edgar Cárdenas, denunció que hay "una política de Estado que busca silenciar la información", y rechazó que las acusaciones a periodistas detenidos "se fundamenten en los presuntos delitos de incitación al odio, terrorismo y asociación para delinquir, lo que criminaliza la labor periodística".