Blanca Thiebaut y Montserrat Serra, las dos trabajadoras de la ONG Médicos Sin Fronteras que fueron raptadas en Kenia y posteriormente trasladadas a Somalia, han cumplido un año de secuestro.
Thiebaut y Serra, que realizaban labores logísticas, fueron secuestradas el 13 de octubre del año pasado en el campo de refugiados somalíes de Dadaab, situado en el norte de Kenia y junto a la frontera con Somalia.
Eso ocurrió unos días antes de que unos individuos armados se llevaran de los campos de refugiados saharauis de Tinduf (Argelia) a otros dos españoles y una italiana que ya fueron liberados el pasado mes de julio, Ainhoa Fernández del Ricón, Enric Gonyalons y Rossella Urru. Tras la liberación de estos dos cooperantes españoles y la italiana en el norte de Malí, Thiebaut y Serra son las dos únicas personas españolas que permanecen secuestradas.
Las últimas noticias relativas a las dos cooperantes de MSF surgieron el pasado mes de marzo. El director general de la Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo (ACCD), Carlos Llorens, aseguró que se encontraban retenidas en un punto indeterminado pero "bien", lo que "tranquilizaba" a la familia.
No obstante, según el responsable de la ACCD lo mejor en los casos de secuestro es "no decir nada", por lo que reclamó discreción para poder resolver lo antes posible el secuestro. Días más tarde, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo aseguró estar trabajando desde el primer día en favor de la liberación de Thiebaut y Serra.
Este mes de octubre, MSF ha denunciado ante el Comité Ejecutivo del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) que la seguridad en campamentos como el de Dadaab, aunque ha mejorado en los
últimos meses, sigue siendo inestable, lo que impide la entrega de ayuda humanitaria.
De hecho, desde julio, cuando varios trabajadores de MSF fueron atacados en Dadaab, la ONG no tiene un equipo permanente dentro del campamento. MSF ha pedido al Comité de ACNUR que este campamento también se convierta en una prioridad en la reunión entre los estados miembros de este organismo. ESPAÑOLES SECUESTRADOS
En los últimos años, varios cooperantes españoles han sido secuestrados en distintas zonas de Africa. Así, el 26 de diciembre de 2007, otras dos cooperantes de MSF, la médico leonesa Mercedes García Valcarce y una compañera argentina enfermera, fueron raptadas cerca de Bossasso, en la región somalí de Puntlandia, donde participaban en un programa de nutrición.
Ambas recuperaron la libertad una semana después, tras una negociación en la que se implicó el entonces embajador de España en Kenia, Nicolás Martín Cinto. El diplomático participó después en la resolución de otro secuestro, el del fotógrafo José Cendón, también en Puntlandia en noviembre de 2008.
El 23 noviembre de 2009, fueron capturados en Mauritania tres miembros de la ONG Barcelona Acció Solidària --Alicia Gámez, Albert Vilalta y Roque Pascual--, que estuvieron en poder de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI). Gámez estuvo retenida durante más de tres meses y sus compañeros casi nueve.