Siete expresidentes piden libertad para Leopoldo López y observadores electorales

Siete expresidentes latinoamericanos han pedido hoy una observación internacional en las elecciones venezolanas de diciembre y han exigido la libertad del líder opositor Leopoldo López, condenado a casi 14 años de cárcel, después de que el fiscal denunciara presiones del Gobierno de ese país.

Los expresidentes Jorge Quiroga (Bolivia), Andrés Pastrana (Colombia), Laura Chinchilla (Costa Rica), Ricardo lagos (Chile), Felipe Calderón (México), Alejandro Toledo (Perú) y Luis Alberto Lacalle (Uruguay), que participan en una reunión del Club de Madrid en la capital de España, han realizado una declaración conjunta sobre la situación de Venezuela.

Los expresidentes han pedido que se anulen los "procesos amañados" y la "persecución" al líder opositor venezolano Leopoldo López y a todos los opositores al régimen y una "observación internacional" de las elecciones legislativas convocadas para el 6 de diciembre en Venezuela.

Además, en su declaración, leída por el expresidente boliviano Jorge Quiroga, afirman que "sería un contrasentido" que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU acepte al régimen venezolano, que "persigue a la oposición, criminaliza a la disidencia y no respeta la libre expresión".

Esta declaración se produce después de que el pasado viernes el fiscal acusador en el juicio de López, Franklin Nieves, admitiera el "carácter fraudulento de las pruebas" contra el opositor, algo que ratificó ayer en una entrevista televisiva desde Estados Unidos, a donde huyó desde Venezuela.

El expresidente chileno Ricardo Lagos ha afirmado que "donde se violan los derechos humanos es una obligación de los demócratas levantar la voz", en línea con el peruano Alejandro Toledo, quien insistió en que "los derechos humanos son universales" y "no tienen nacionalidad".

Pedir que estos derechos se respeten en Venezuela no es intervenir en sus asuntos, ha agregado Toledo.

Los expresidentes han lamentado también el silencio oficial de los mandatarios latinoamericanos actuales ante la situación de López, condenado por instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendio, tras los actos violentos que se produjeron en manifestaciones contra el Gobierno en febrero del año pasado, que causaron 43 muertos.

QUE SE RMPA EL ESTRUENDOSO SILENCIO

Por su parte, el expresidente mexicano Felipe Calderón ha pedido que los gobiernos democráticos "rompan el estruendoso silencio" ante este "inocultable abuso", en referencia a las declaraciones del fiscal Nieves."¿Qué estarán pensando hoy los presidentes de América Latina cuando el fiscal ha dicho que este es un juicio falso?", se ha preguntado Andrés Pastrana.

Respecto a las elecciones legislativas del 6 de diciembre en Venezuela, los exmandatarios han pedido una observación internacional y han reclamado la presencia del jurista y exministro brasileño, Nelson Jobim, quien supuestamente iba a presidir el grupo de observadores de UNASUR pero ha sido rechazado por Venezuela.

En el acto ha estado presente el padre de Leopoldo López, quien ha agradecido el apoyo que está recibiendo, ha insistido en que los derechos humanos no tienen nacionalidad y ha calificado como "burla al mundo" que Venezuela esté sentada en el Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

El padre del opositor venezolano ha denunciado también persecución política en Venezuela, donde dijo que además de los 80 políticos presos, hay 3.000 personas que tienen coartada su libertad y que no pueden participar en política.

También ha intervenido el periodista venezolano Miguel Henrique Otero, director del periódico El Nacional, quien ha declarado que Venezuela es "una dictadura pura y dura" y ha denunciado la persecución que sufren los medios de comunicación en su país.