La fiscalía alemana pide al Tribunal retirar la euroorden contra Puigdemont

La Fiscalía del estado federado alemán de Schleswig-Holstein confirmó hoy que ha recibido de la Justicia española la comunicación de la retirada de la euroorden contra el expresidente catalán Carles Puigdemont y que ha solicitado a la Audiencia territorial terminar con el proceso de extradición. La fiscalía añadió que con la comunicación recibida por parte de las autoridades españolas "queda retirada la base del procedimiento".

El auto de retirada de la euroorden contra Puigdemont fue anunciado el jueves por el juez del Tribunal Supremo español, Pablo Llarena. "Ahora se ha solicitado a la Audiencia de Schleswig-Holstein la cancelación de la orden de detención y entrega contra Carles Puigdemont", agregó la Fiscalía en su comunicado. "Tras la cancelación de la orden de detención y entrega habrá terminado el procedimiento de la extradición", añadió la Fiscalía.

Procedente de Finlandia, Puigdemont fue detenido el 25 de marzo pasado por la policía alemana cuando intentaba regresar en automóvil a Bélgica, país al que huyó a últimos de octubre pasado.

El Ejecutivo español, amparado en la Constitución, destituyó a Puigdemont y a todos sus consejeros el 27 de octubre de 2017, después de que el Parlamento regional de entonces aprobase una declaración a favor de la independencia unilateral de Cataluña.

La Audiencia de Schleswig-Holstein, estado del norte de Alemania donde fue detenido Puigdemont, resolvió el pasado 12 de julio que podía llevarse adelante la extradición del líder soberanista por un presunto delito de malversación de fondos, pero no por un presunto delito de rebelión.

La Audiencia explicó en su resolución que, en su opinión, no se produjo el grado de violencia "suficiente" para considerar el delito de rebelión. "La cantidad de violencia que prevé el delito de alta traición (equivalente alemán al tipo español de rebelión) no se alcanzó en los enfrentamientos en España", argumentó la Audiencia sobre los incidentes de la jornada del referéndum ilegal del pasado 1 de octubre.

Tampoco admitió el delito de perturbación del orden público, que planteó también la Justicia española en el caso de que no se admitiese finalmente el delito de rebelión, alegando que Puigdemont "no era el líder espiritual de las acciones violentas".