Durante el transcurso de su vida, las palabras de Mandela resultaron inspiradoras para su pueblo y todos quienes seguían su lucha por la igualdad en Sudáfrica. Las siguientes son algunas de sus frases más recordadas:
"Después de escalar una montaña muy alta, descubrimos que hay muchas otras montañas por escalar".
"Todo parece imposible hasta que se hace".
"La mayor gloria no es nunca caer, sino levantarse siempre".
"La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo".
"Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión".
"La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo".
"Un hombre educado no puede ser oprimido porque es capaz de pensar por sí mismo".
"Si quiere hacer las paces con su enemigo, usted debe trabajar con él".
"No es valiente aquel que no tiene miedo sino el que sabe conquistarlo".
"La democracia exige respetar los derechos políticos de las minorías".
"Una nación no debe juzgarse por cómo trata a sus ciudadanos con mejor posición, sino por cómo trata a los que tienen poco o nada".
"Mucha gente en este país ha pagado un precio antes de mí, y muchos pagarán el precio después de mí".
"Si quiere hacer las paces con su enemigo, usted debe trabajar con él".
"Si yo tuviera el tiempo en mis manos haría lo mismo otra vez. Lo mismo que haría cualquier hombre que se atreva a llamarse a sí mismo un hombre".
"Me gustan los amigos que tienen pensamientos independientes, porque suelen hacerte ver los problemas desde todos los ángulos".
"La muerte es algo inevitable. Cuando un hombre ha hecho lo que él considera como su deber para con su pueblo y su país, puede descansar en paz. Creo que he hecho ese esfuerzo y que, por lo tanto, dormiré por toda la eternidad".
"Yo no tenía una creencia específica, excepto que nuestra causa era justa, era muy fuerte y que estaba ganando cada vez más y más apoyo".
"Los verdaderos líderes deben estar dispuestos a sacrificarlo todo por la libertad de su pueblo".