(Actualizado

Las tres jóvenes desaparecidas hace una década que fueron halladas ayer en una casa de Cleveland (Ohio) estuvieron embarazadas y abortaron en varias ocasiones durante su cautiverio por las violaciones y golpes de los secuestradores, indicaron fuentes policiales a medios locales.

Según el canal de televisión local WKYC-TV de Cleveland, que citó fuentes policiales, hubo "múltiples" embarazos de las jóvenes Amanda Berry, Gina DeJesus y Michelle Knight y, aunque no precisaron la cifra, en algunos medios se habla de hasta cinco embarazos.

Asimismo, los investigadores están revisando el patio trasero de la casa, en el que se ha observado "tierra removida". La policía también confirmó que en la casa vivía una niña de 6 años, hija de Berry.

Amanda Berry, desaparecida en 2003, un día antes de su 17 cumpleaños, consiguió pedir auxilio ayer en un descuido de sus captores.Berry explicó a sus liberadores que en la casa había más personas recluidas contra su voluntad: Gina DeJesus, desaparecida en 2004, con 14 años, y Michelle Knight, cuyo rastro se perdió en 2002, cuando tenía 20.

El alcalde de Cleveland, Frank Jackson, dijo en rueda de prensa que las autoridades tienen "muchas preguntas sin responder", como por qué los vecinos no detectaron que había tres personas recluidas en esa casa durante tanto tiempo.

EL FBI ENTREVISTA A LAS TRES JÓVENES YE INTERROGA A LOS SECUESTRADORES

El FBI concluyó este martes sus entrevistas con las tres jóvenes secuestradas durante una década en Cleveland (Ohio, EE.UU.) y a la hija de una de ellas, y prevé interrogar mañana a los tres hermanos sospechosos de mantenerlas retenidas en la vivienda.

Un especialista en víctimas infantiles del FBI entrevistó y a Amanda Berry, desaparecida en 2003, y su hija de 6 años, concebida durante el cautiverio, además de a Gina DeJesus, desaparecida en 2004, y Michelle Knight, cuyo rastro se perdió en 2002, en un "ambiente cómodo" para ellas, según indicó a la cadena CNN una portavoz del FBI, Vicki Anderson.

El propietario de la casa, Ariel Castro, de 52 años, y sus hermanos, Pedro, de 54, y Oneil, de 50, serán interrogados este miércoles, probablemente por un equipo conjunto de policía local y agentes del FBI, precisó Anderson. Según la CNN, hoy podría producirse también la presentación formal de cargos, que pueden incluir la detención ilegal, violación u otros tipos de abusos o torturas.

Las autoridades registraron ya la casa de Ariel Castro, con la ayuda de un perro especializado en la búsqueda de cadáveres, indicó Anderson. Los investigadores han revisado además el patio trasero de la casa, donde se ha observado "tierra removida". Las jóvenes secuestradas han comenzado a retomar el contacto y reunirse con sus familias, y Berry pudo hablar esta tarde por teléfono con su abuela, Fern Gentry.

En la conversación, reproducida por la cadena local WJHL, Berry dijo a su abuela que se encuentra "bien" y que la niña de 6 años rescatada junto a ella el lunes es efectivamente su hija. "He pensado en ti todo este tiempo. Nunca te he olvidado", afirmó su abuela en la conversación.